La curva de la vida de Maestro Joao ha servido para que la audiencia conozca la cara más desconocida del adivino, que se ha abierto en canal durante ‘Límite 48 horas’ de este martes y solo unos después de que Pol Badía entrara en la casa de GH VIP 7. Los últimos días no están siendo fáciles para Joao, que está viviendo una verdadera montaña rusa, como su curva de la vida ha servido.
“Tuve una niñez pobre, pero no era infeliz. Vivía en unas chabolas en la barrio San Pascual, pero era feliz”, comenzó diciendo. Se crió en una chabola en un barrio muy humilde, pero con el cariño de su familia. “Todos vivíamos en la chabola en lo que paradójicamente era el Barrio de la alegría”, añadió. Durante esos años, la figura de su madre fue esencial, no así la de su padre.”No nombro a mi padre, no voy a hablar mal de él por respeto, pero mi madre fue la que luchó”, aclaró.
Su madre fue la persona que le salvó del momento más duro de su infancia. “Una persona conocida abusó de mí con 14 años. Él tendría como 30 y tantos años, pero no voy a decir nada porque me parecería feo. Falleció de una manera fea”, reveló.
Entrar en el cuarto en el que dibujó su curva de la vida le recordó a ese desagradable momento. “Fue en la calle General Ricardo. Me llevó a un sitio oscuro y me empujó. Yo llevaba un peto vaquero y una camisa abierta porque yo era muy así”, añadió.
Después se cerró en sí mismo y se refugió en las drogas y el alcohol. “Tuve problemas con las drogas y llegué a desayunar whisky”, finalizó.