En un año y medio, Kiko Rivera ha dado un cambio radical. Desde que se puso una banda gástrica para reducir su peso, el DJ ha bajado 50 kilos. Aunque al principio estaba reticente y no se atrevía a hacerlo, los buenos resultados de comprobó en su prima le animaron a dar el paso. Anabel Pantoja ha perdido 30 kilos en los últimos cinco años, pero antes de esto la colaboradora de ‘Sálvame’ y su primo se daban auténticos homenajes gastronómicos sentados enfrente de la mesa. Y ha sido Kiko Rivera quien lo ha destapado en 'GH DÚO'.
“Mi prima pesaba 100 kilos”, recordaba el DJ a sus compañeros. Kiko y Anabel tiene una relación tan estrecha que son como hermanos y compartían muchos momentos, muchos de ellos giraban entorno a la comida. “Nos poníamos los dos a comer y…” añadía Kiko.
“Se hizo la operación y yo esperé cinco años”, recordaba Kiko. Un bache de salud fue lo que le hizo cambiar de actitud y tomar conciencia de que tenía un problema. “Me la hice [la operación] porque una vez me puse malo y el médico me dijo que o adelgazaba o cualquier día me iba a dar un infarto”, apostillaba.
“Desayunaba tres veces, comía otras tres...Hacía 12 o 15 comidas al día”, señalaba Kiko que añora comer pan, uno de sus alimentos favoritos.
En el plató de ‘Sábado Deluxe’, Anabel ratificó la versión de Kiko. “Yo desayunaba cola cao, galletas, tostadas.... Y no me comía un plato de espaguetis, era una fuente. Era mucha ansiedad”, echaba la vista atrás la sobrina de la tonadillera.
“¿Y te veías gorda?”, le preguntaba Jorge Javier Vázquez. “Claro que yo me veía gorda, pero yo no he tenido complejo ninguno. Lo pasaba muy mal cuando iba a comprar ropa y luego cuando iba las discotecas, que yo era la típica que iba a por las copas y acompañaba al baño”, remataba. Y sí, claro que ligaba porque, dice, “siempre” ha tenido su “público”.