Hace unos días saltaba la alarma por la salud de Isabel Pantoja (67 años). La cantante ha tenido que suspender su próximo concierto en Tenerife por recomendación médica y aunque se supone que no habría por qué asustarse, Luis Pliego, director Lecturas, avanzó algunos detalles sobre cómo estaría realmente la intérprete de 'Marinero de luces'.
En medio de esta incertidumbre sobre cómo está realmente Isabel y con una situación familiar de lo más variopinta porque la artista lleva años sin hablarse con sus hijos, ha sido Isa Pantoja la que ha tenido un gesto con la que podría acercar posturas a su madre. Aunque la colaboradora de 'Vamos a ver' ya dejado claro en varias ocasiones que da casi la relación por perdida y que ha encontrado la paz dentro de esa espiral de dolor, la hermana de Kiko ha confesado que se ha puesto en contacto con su familia para ver cómo está.
"Si ella ha cancelado este concierto tiene que tener algo que le impida hacerlo, ella es súper responsable, se prepara... Anabel tampoco sabe nada", ha comenzado diciendo Isa en el programa de Joaquín Prat. Eso sí, Isa ha querido tranquilizar a todos dejando claro que no hay por qué preocuparse.
"No considero que sea algo grave, entiendo que me lo habrían dicho. Cuando pasó lo de mi hermano, me enteré por otras personas y ahí estuvo. Entiendo que no será grave. ¿Me he interesado en preguntar? Pues sí, pero a ella no le he preguntado porque no tengo relación, y no es porque yo no quiera sino porque los mensajes no serán contestados", ha aclarado la colaboradora, que se acaba de comprar una casa y está en plena reforma para dejarlo todo a su gusto y al de Asraf.
La nula relación entre Isa Pantoja y su madre
Muy feliz con la casa de sus sueños en Cádiz, Isa lleva muchos meses que ni ve ni habla con su madre. Se puede decir que su relación es nula y no porque la hija pequeña de la cantante no lo haya intentado una y otra vez. De hecho, durante meses en sus apariciones en televisión ha parecido ser la única cuerda de todo el clan Pantoja. Muy consciente de lo que es tener una relación con su hijo, algo que le ha hecho madurar desde muy joven, la hermana de Kiko concedió una entrevista a Lecturas en la que se sinceró como nunca.
El pasado enero Isa, que expresó que si su madre la llama ella irá, contó que en cierta parte siente consuelo cuando le llega que su madre no tiene intención de retomar la relación: "Escuchar esto me hace sentir mucho mejor. Escuchar que mi madre pasa de mí me quita un peso de encima, me hace entender que no tengo toda la culpa; constata que la responsabilidad de reconstruir la relación no recae en mí, explicó.
En una situación tan complicada y dejando claro que ella ha hecho todo lo que ha estado siempre en su mano por estar al lado de Isabel (a pesar de los continuos desaires que se ha encontrado en el camino, como cuando tuvo que saltar la valla), la colaboradora de Telecinco se aferra a la esperanza de que todo lo que la llega no sea verdad: "Nunca he escuchado de su boca decir esas cosas, así que no les doy muchas vueltas. Si me cerciorara de que mi madre dice todas esas cosas sobre mí, diría: 'Ahora sí puedo hacer caso a la gente que me dice: Olvídate de tu madre'. En quien pienso es en Asraf y en mi hijo, en nadie más!", confesó tajante pero emocionada.
Meses después de su 'sí, quiero' con el modelo marroquí y habiendo dicho todo esto en Lecturas, Isa dio un paso más: "Quité la foto de mi madre después de la boda. Siempre he estado muy prudente, pero quiero hablar. No creo que la culpa de que acabes mal sea de los padres, pero sí que creo que la familia es la base de todo y puede crearte traumas. Yo he tenido una infancia feliz y me refugio en la adopción porque me parece algo tan bonito que me hace olvidarme de las cosas malas".
Eso sí, si ya tiene muy claro que la única prioridad que tiene ahora en la vida es Albertito: "Creo que tener una foto de mi madre, además de artista, creo que no refleja que sea ni mi madre ni su abuela. Yo tengo un sobre lleno de fotos con ella y eso me parece más cercano cuando ni tengo relación con ella ni creo que la tenga. Mi hijo me preguntó en su momento, pero cada vez lo hace menos. Ha tenido la oportunidad de hablar conmigo y con mi hijo y no lo ha hecho. Quizá, cuando el niño sea mayor, mi madre quiera tener una relación con él, pero para mi hijo la prioridad seré yo, no ella", concluyó.