La Georgina Rodríguez (29 años) a.C. (antes de Cristiano) no existe, solo es una sombra. Lo que pasó en la vida de la de Jaca antes de 2017 no tiene relevancia alguna a la hora de hablar de ella. Eso es lo que pretende la pareja de Cristiano Ronaldo, que espera que el martes 3 y el miércoles 4 de octubre se dicte jurisprudencia al respecto. ‘Gio' quiere ser únicamente ella quien cuente su historia. Y en ello está.
Tal y como asegura Pilar Vidal, en exclusiva para ABC, Georgina Rodríguez desea blindar su vida privada. Y por vida privada entiende a todo lo que sucedió antes de empezar su romance con Cristiano Ronaldo. Lo de antes, o lo cuenta ella o no quiere que nadie lo cuente. Ella desea ser dueña y señora de su pasado, de su vida como anónima y, sobre todo, de su vida cuando todavía era menor de edad.
Georgina Rodríguez frena las insinuaciones sobre su vida antes de ser famosa
Cuando empezó su historia de amor con el futbolista, muchos y muchas aprovecharon el tirón mediático de Georgina Rodríguez para hablar de su supuesto pasado. Esta madre de familia numerosa se topó con testimonios que la hicieron sentir muy mal; así que dejó todo en manos de sus abogados. A finales de 2021, los letrados que la representan interpusieron una demanda por todas estas informaciones que tentaban contra su honor y su derecho a la intimidad. Y ahora, casi dos años más tarde, tendrá lugar el juicio.
Georgina Rodríguez, juicio este martes y miércoles
El martes 3 y el miércoles 4 de octubre, en los juzgados de Pozuelo de Alarcón, tendrá lugar el juicio que pretende ‘borrar’ el pasado más anónimo de Georgina Rodríguez. Si alguien, a partir de ahora, habla de sus inicios laborales, de sus orígenes humildes o de cómo se comportaba con su familia, puede encontrarse con una demanda de la ‘influencer’; ya que, creando jurisprudencia, sienta precedente y obliga a que nadie pueda atentar a su derecho a la intimidad.
Ella es la única que está en su derecho de hablar de su niñez, adolescencia o primeros años en Madrid, donde llegó de Jaca con el deseo de abrirse camino en la capital. Si el juez le da la razón, esa primera Georgina no existe. Queda absolutamente blindada salvo si es ella quien habla del tema.
Georgina Rodríguez, vida expuesta en un reality en sus redes sociales
El caso de Georgina Rodríguez es muy concreto porque ella reclama un derecho a la intimidad mientras prepara la tercera temporada de su reality. El show de telerrealidad de la ex vendedora de artículos de lujo es todo un éxito en Netflix. Ahí la vemos compartir su día a día, su vida al lado de sus hijos, sus encuentros con Cristiano Ronaldo, sus viajes, sus compromisos con las marcas... De hecho, en la última temporada habló abiertamente de uno de los episodios más dolorosos de su vida: la pérdida de su hijo. Todo quedó plasmado en esta serie.
Habrá quien diga que alguien como ella, que desgrana su intimidad de manera pública, no puede reclamar este derecho a la intimidad; pero lo cierto es que sí. De hecho, así plantean defenderlo sus abogados; exponiendo que ella en redes sociales, ante sus más de 7 millones de seguidores, muestra su vida actual; al igual que ocurre con su reality. Todo el universo Georgina gira en torno a la Georgina actual, no a la de hace una década. Y a eso se aferran. Además, proponen que, aunque ella muestre su intimidad, sigue manteniendo su derecho a la misma.
2023, un año clave para Georgina
La 'influencer' y toda su familia se han instalado en Arabia Saudí, a raíz del fichaje de Cristiano por parte del Al Nassr Football Club. Ahí, Georgina Rodríguez ha afianzado aún más su perfil como rostro público, desde donde ha promocionado la segunda temporada en el reality, y ha continuado cumpliendo sus compromisos con las firmas de la que es imagen. Y el otoño se le plantea interesante con este juicio que lleva dos años esperando. ¿Será tan beneficioso como ella espera o tendrá que seguir viendo cómo otros cuentan su historia?