Un año más Cayetano Rivera (45 años) y su hermano Kiko (38 años) han pasado la Navidad juntos. El Dj, acompañado de Irene Rosales (31 años) y sus dos hijas, se trasladaban en la mañana del 25 de diciembre a la nueva casa que el torero ha adquirido en Sevilla tras su reciente separación de Eva González. Todos juntos disfrutaron de una íntima y divertida velada en la que no faltaron los regalos para los más pequeños.
Aunque en los últimos años era Cayetano quien se trasladaba hasta Castilleja de la Cuesta (Sevilla), esta vez el torero, que vive su primera Navidad como hombre separado, ha actuado de perfecto anfitrión para su hermano y la mujer de este. En la imagen que Kiko Rivera ha compartido en redes sociales, ambos posan con sus hijos frente al árbol de Navidad y el tradicional belén con el que el torero ha decorado su nueva casa. "Familia", escribe el Dj, quien también ha protagonizado un acercamiento con Isabel Pantoja en estas fechas tan señaladas.
Con esta imagen tan bonita y familiar se confirma que Cayetano ha disfrutado de la Nochebuena y la Navidad con su hijo, mientras que Eva González lo hará presumiblemente en Año Nuevo.
Francisco Rivera, el gran ausente
El gran ausente de la velada familiar fue su hermano Francisco. El mayor de los Rivera Ordóñez pasó estas fechas tan señaladas junto a la familia de su mujer Lourdes Montes, gesto con el que confirma que la relación con sus hermanos no pasa por un buen momento. "Con Cayetano, ni es paz ni es guerra (...) Tenemos vidas distintas, nada más. Ante todo, somos hermanos. Y tampoco es que no nos podamos ni saludar", confesaba recientemente restando importancia a su evidente distanciamiento.
Cayetano y Kiko, más unidos que nunca
Kiko Rivera nunca ha ocultado que Cayetano siempre ha sido su hermano favorito. Aunque su vínculo se empezó a crear cuando ambos eran ya adultos -cabe recordar que se conocieron en la boda de Francisco con Eugenia Martínez de Irujo en 1998-, desde hace años se han vuelto inseparables y el Dj no oculta que siente debilidad por su hermano mayor. El torero estuvo a su lado cuando la relación con su madre saltó por los aires, también ha sido un apoyo incondicional cuando sufrió un ictus el pasado mes de octubre, y ahora que Cayetano lo necesita, Kiko no ha dudado en correr a su lado para hacerle más llevadera esta primera Navidad separado de Eva González.