El último adiós al príncipe Kardam de Bulgaria ha estado lleno de rostros afligidos. A pesar de los casi 7 años de enfermedad que atravesó el primogénito de Simeón II y de Margarita de Bulgaria, su fallecimiento ha sido un duro golpe para todos los que lo conocieron.
El funeral, celebrado en el mismo cementerio al que fueron llevados sus restos mortales tras su fallecimiento, el de San Isidro, se ha llenado este mediodía de nombres de la aristocracia internacional. Todos querían despedirse de Kardam.
Ha sido un momento de recogimiento y de unión familiar, en el que todos los hermanos han vuelto a estar unidos. Kalina, que ha viajado desde Marruecos, donde actualmente reside, Konstantin, Kyril y Kubrat, todos reunidos para decirle “hasta siempre” a su hermano mayor.
Por CONCHI ÁLVAREZ DE CIENFUEGOS