EXCLUSIVA: Kike, el hijo de Bertín Osborne y Fabiola, se recupera ya en casa tras pasar por la UVI

Han vuelto a sufrir otro revés: su hijo Kike, que nació con grave lesión cerebral debido a la bacteria Listeria, ha estado hospitalizado

Bertín Osborne y Fabiola Martínez ya respiran tranquilos por su hijo Kike. El pequeño de once años se encontraba ingresado en la UVI desde hace días, convirtiéndose en la máxima preocupación de sus padres y del resto de la familia. Por suerte, el presentador y la exmodelo ya le tienen en casa desde el domingo tal como hemos podido saber en Lecturas en exclusiva. Su entorno más cercano ha asegurado a nuestra revista que Kike está siendo colmado de atenciones y mimos en la calidez de su hogar.

El hijo mayor de Bertín y Fabiola se ha enfrentado con valentía a la prueba más dura que le ha sometido su salud. Sus padres tomaban la decisión de que Kike pasara por quirófano y se sometiera a una "intervención bastante complicada" para superar sus problemas de movilidad. Conscientes de los riesgos han decidido asumirlos todos juntos para que el pequeño ganara en calidad de vida y darle la oportunidad de no tener que vivir postrado en una silla de ruedas.

La operación realizada en septiembre en Sevilla era todo un éxito y, debido a los cuidados que debía recibir Kike, optaban por quedarse todos en la capital hispalense, donde han permanecido hasta el pasado el 5 de enero, que se trasladaron a Madrid. El año ha transcurrido relativamente tranquilo en el hogar del cantante, a pesar de que la recuperación de su hijo ha marcado las dinámicas de la cotidianidad familiar. Alcanzaban el 5 de enero y vivían la víspera del Día de Reyes con emoción, hasta que Kike "empezó a sentir molestias y a quejarse".

El pequeño de once años, que nació con una grave lesión cerebral debido a la bacteria Listeria de la que también le han derivado problemas de osteoporosis, era intervenido entonces de las fracturas en los dos fémures en un hospital de la Comunidad de Madrid. Tras unos días hospitalizado en la UVI, las noticias que llegan de su entorno más próximo son esperanzadoras. "Está mucho mejor, contento y jugando con su hermano", nos cuentan.

Tanto Bertín como Fabiola, han estado en todo momento muy pendientes y preocupados por la salud de su hijo mayor. “La gracia que le hace ir al médico... 😕... ni revisión, ni nada!!! Literal "echayapalla". Es ver una bata blanca o verde y frunce el ceño”, escribía la modelo en su cuenta de Instagram el pasado noviembre sobre lo poco que le gustaban a Kike los hospitales.

Eso sí, a pesar de todos los problemas, nunca pierden la sonrisa, como lo demostraron hace un par de semanas abriendo los regalos que les habían traído los reyes magos a los pequeños de la casa. ¡Ánimo!