Se fue de la misma manera que siempre vivió, discretamente y rodeado solo de los suyos. Enrique Ortiz López Valdemoro, padre de Bertín Osborne falleció el pasado 18 de octubre, a los 96 años, mientras dormía, según explicó el propio presentador, que, cumpliendo con sus deseos, no hizo público el suceso y por tanto lo velaron y se despidieron de él tan solo sus hijos y nietos, nadie más. Sin duda un triste suceso, del que Bertín explicó que dentro de la tristeza ha sido de la mejor forma posible, casi sin enterarse y habiendo gozado de buena salud hasta el último de sus días.
Ahora deja en el mundo su mayor legado, que son sus cuatro hijos, dos títulos nobiliarios heredados de su familia materna y un patrimonio nada desdeñable. Uno de los títulos, el condado de Navas, se lo cedió en 1994 a su hija María Teresa, y el otro, el condado de Donadío de Casasola lo ostentó hasta el último de sus días y ahora cualquiera de sus hijos, teniendo preferencia Bertín por ser el mayor, si así lo solicita, podrá heredar el título de su padre.
La millonaria herencia del padre de Bertín Osborne
En cuanto al plano profesional, Ortiz estaba al frente de tres empresas con la ayuda de sus hijas. En 1981 arrancó su andadura como empresario con Oficina de Gestión y Promoción de Inversiones SA, dedicada a la compraventa de bienes inmuebles y que, pese a registrar poquísima actividad en los últimos años, en las cuentas de 2023 aún estaba valorada en 820.000 euros. En 1986 dio de alta Cs Osborne SL, dedicada al sector de los seguros, en los últimos años en calidad de entidad colaboradora, y que estaba valora- da, según datos de 2023, en 243.000 euros. Y dedicada al mismo sector, en 1987, emprendió con Prestaciones Sociales Salinas Blancas SL que fue tan bien como la anterior y mantenía en la actualidad un activo de 243.000 euros. Sin duda una larga y fructífera trayectoria…
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