Lecturas ha arrancado la Navidad con un posado único. María Patiño (51 años) se ha confesado con su amiga y compañera Terelu Campos (57 años) en las páginas de nuestra revista. Su complicidad es envidiable. Se respetan y se tienen un enorme cariño. Más que una entrevista es una charla entre amigas, que comparten confesiones, reflexiones, temores e ilusiones. De lo profesional, a lo personal y la intimidad que guardan con tanto celo. La copresentadora de 'Sálvame' se relaja y supera su timidez a la vez que Terelu derriba los muros con los que se protege. Hasta se atreve a hablar de la persona que más protege, su hijo. Tomando de referencia cómo viven en su hogar estas fechas navideñas tan especiales, María Patiño cuenta por primera vez lo que realmente les une.
Recientemente, la presentadora de 'Socialité' contó cómo era su animado día a día. A la de Ferrol se le ilumina la cara cuando habla de la original y preciosa familia que forma con su marido Ricardo Rodríguez, su hijo, sus chinchillas y el divertido Beige. "Dedico casi 20 minutos a cuidar a mis chinchillas, luego a mi chico, a mi hijo y tengo un perro que se llama Beige, y luego paso todas estas horas trabajando aquí", revelaba. Ya sea en casa o en su amada Fuerteventura, seguro que para ella son todos ellos juntos los que dan sentido a la palabra "hogar".
María Patiño cuenta cómo se parece su hijo a ella
La hemos visto romperse en directo cuando en 'Sálvame' se pone la tarde intensa, incluso en 'Socialité' cuando, el Día de Todos Los Santos, tiene un recuerdo para sus progenitores. Sin embargo, en la intimidad de su casa manifestar emociones se ha convertido en una especie de 'cuenta pendiente' para ella y su hijo. Una realidad que nunca había explicado, hasta ahora. "Es como yo, un poco retraído", confiesa en nuestras páginas, "pero después se le escapa una sonrisa de medio lado". María reconoce que "le cuesta expresar emociones, como a mí". Y con un punto de orgullo en la voz y en su mirada despierta, admite: "En eso nos parecemos mucho".
María Patiño se ha mostrado siempre muy reservada a la hora de dar detalles sobre su hijo, por la responsabilidad que tiene de protegerle. Relajada y al hablar de estos días se emociona. Las ausencias de sus padres las siente más que nunca, "es verdad que yo echo mucho de menos a mis padres, pero desde que no están los siento más presentes", nos cuenta.
La promesa de la presentadora, una madre orgullosa y responsable
La compañera de Terelu Campos dejó clara su postura al respecto del anonimato de su hijo hace tiempo. Y acabó revelando la promesa detrás del motivo para evitar hablar de él: "Una de las cosas que me prometí a mí misma cuando decidí ser madre es que tenía una obligación por encima de todas, y era protegerlo. A partir de ahí, lo llevo al extremo. Es muy importante que para que sea feliz esté muy al margen de todo".