EXCLUSIVA | La historia de superación de Mayte García: "Prometí a mi hijo que iba ser feliz por él"

Mayte García (40 años) nos ha recibido en su casa de soltera en Valencia. La que fuera mujer del exfutbolista Santiago Cañizares, ha encontrado en este acogedor hogar el lugar perfecto para hacer balance de este año y de recordar con mucho amor a su hijo Santi. El pequeño falleció a los 5 años víctima de un tumor cerebral. Desde entonces, no ha habido ningún día en el que Mayte no haya tenido presente a su niño. De él nos ha hablado con admiración, pasión y orgullo y nos ha asegurado que “siento a mi hijo dentro de mí. Es como si él estuviera todo el rato”.

La preciosa promesa de Mayte García a su hijo Santi

Mayte García nos ha contado que Santi es en quien se refugia en los malos momentos. Tan presente tiene a su hijo, que la empresaria nos ha asegurado que “cuando necesito hablar con alguien pero no quiero hablar con nadie físico, hablo con él. Mentalmente conecto con él”. Porque para ella no hay conexión más bonita y reconfortante que esta. Además, es su pequeño el que le da fuerzas para afrontar el día a día con entereza y con una sonrisa. Esa fue la promesa que Mayte le hizo a Santi. La ex de Cañizares nos ha contado que “yo le prometí a mi hijo que iba a ser feliz por él, es mi mantra diario”.

Mayte García recuerda la estancia de Santi en el hospital

Una filosofía de vida que en cierto modo también intentó adoptar durante la enfermedad del pequeño y durante su paso por el hospital. Mayte García se ha remontado a aquella época para recordar cómo iba maquillada al hospital cada día. “Yo pensaba: “Estos médicos se van a creer que yo voy al hospital para enamorarles”, pero no, iba al hospital para que me hijo me viera guapa”, ha contado sobre la preciosa razón por la que tenía esa actitud en el momento más difícil. Con nostalgia, ha hablado de cómo “él no podía hablar, porque le dieron dos infartos cerebrales, y se me quedaba mirando mientras me tocaba la cara. Y yo me ponía unos buenos zancos, eh, unos buenos tacones para estar todo el día en el hospital”.

Mayte García, sobre esta actitud que tomó, también ha recordado uno de los momentos más duros. “Mi hijo no me vio llorar jamás. Solamente el día antes de morirse, que entró en coma y lo único que hice fue meterme en la cama del hospital con él y pedirle perdón por si le había fallado en algo”, nos ha revelado sobre este momento tan significativo entre madre e hijo.

Su hijo Santi, el mejor ejemplo para Mayte García

Una de las cosas que Mayte García saca de aquel momento, es que su hijo Santi se convirtió en el mejor ejemplo para ella. “Mi hijo se podía haber muerto el día uno con dos infartos cerebrales, pero aguantó y luchó quince meses. Para mí eso sí fue un ejemplo. Fue mi motor y mi fuerza. Yo dije: “Si él sigue, yo también”.

Además, sus hijas se convirtieron en su motor más importante, y hoy en día lo siguen siendo. Sobre esto, nos ha dicho que “no quería que mis hijas crecieran marcadas por el miedo a la muerte y a las enfermedades. No quería que tuvieran una madre depresiva sin ganas de vivir”.