Hija del inolvidable Joaquín Prat, pudo decirle a su padre que iba a seguir sus pasos antes de que nos dejara. Después de trabajar con María Teresa Campos, y de demostrar su excelente química con su hermano Joaquín Prat en 'El programa de AR', vuelve a televisión al lado de Sonsoles Ónega. Su familia es su refugio y también su mayor preocupación. En verano su hermano Federico se convirtió en noticia al contar su difícil situación personal y económica. Alejandra Prat (45 años) se sincera en las páginas de Lecturas, y habla con naturalidad y pedagogía sobre los problemas de adicción de Federico, poniendo en valor el apoyo fundamental que está siendo para él su madre, Marianne Sandberg.
La difícil situación de su hermano Federico por sus problemas de adicción
Federico Prat es el tercer hijo del mítico presentador Joaquín Prat y Marianne Sandberg. Vive en La Línea de la Concepción (Cádiz) y, en agosto de 2022, denunció que su famosa familia le había dejado de lado cuando él estaba atravesando una delicada situación. Alejandra Prat y sus hermanos Andrea y Joaquín se convirtieron en los portavoces de la familia y reaccionaron rápidamente al duro testimonio de Federico, que produjo un gran dolor en su madre.
Los Prat revelaron que el marino mercante atravesaba un problema con las drogas y pedían respeto para gestionar esta situación que Alejandra ha señalado en nuestras páginas como de "drama familiar". Muchos valoraron la naturalidad con la que han resuelto mediáticamente unas circunstancias nada fáciles al tratarlo abiertamente en televisión y con mensajes claros a través de sus redes sociales.
"No sé si ayuda o no, pero, teniéndolo en casa, sabemos lo que es, un drama familiar", reflexiona la colaboradora de 'Y ahora Sonsoles'. "Afortunadamente, hay gente que sale y ese es el mensaje, pero lo primero que hay que hacer es pedir ayuda y estar seguro de que necesitas ayuda", subraya.
"Pienso en mi madre y todo lo que ha tenido que vivir"
En cuanto a esta difícil situación que viven con Federico, Alejandra aclara que "el problema es que él dice que está bien". Con emoción contenida, reconoce que para todos está siendo "duro", pero el esfuerzo hercúleo y el papel que realmente le viene a la cabeza es el de su madre Marianne. "Pienso en ella y todo lo que ha tenido que vivir. Ella ha sido una viuda increíblemente fuerte, pero con lo de mi hermano ya... ¡Vamos, la admiro profundamente!", nos cuenta conmovida.
"Mi hermano Federico es un ser maravilloso con un corazón de oro. Es y ha sido siempre querido en casa, educado, cariñoso, sensible y es, desgraciadamente, también un adicto. Escogió vivir en el sur y continuar con su adicción. Nuestra familia es una piña para lo bueno y para lo malo, y así va a seguir siendo", Andrea Prat rompía así el silencio después de que su hermano Federico se convirtiera en noticia hace medio año.
"Lo mejor era afrontarlo y no esperar a los comentarios"
Joaquín y Alejandra seguían su ejemplo de mostrarse claros sobre sus circunstancias familiares, y la periodista sigue defendiendo el paso que dieron entonces: "Nosotros pensamos que lo mejor era afrontarlo directamente cuando salió públicamente y no esperar a que salieran más comentarios".
Con tantos meses transcurridos, aún sigue sorprendida por la reacción de la gran cantidad de gente que se puso en contacto con ellos. "Muchísima gente nos escribió y me chocó la cantidad de personas que tiene a alguien cercano con este problema, lo grave que es y lo asequible que es llegar a la droga o al alcohol, porque el alcoholismo es otro gran problema". Alejandra zanja el tema con una reflexión que suena a lamento: "Yo no sé si se cae en ello por falta de información o por vulnerabilidad".