Eva González (42 años), sentada en una de las sillas del patio de la casa que Vicky Martín Berrocal tiene en el Rocío, mira a la cámara del móvil con su sonrisa de siempre. Pero ella no es la misma. En los últimos meses, ha tenido que hacer frente a momentos muy difíciles y eso, a una, siempre la transforma. Uno de los más amargos, hace apenas 15 días y en la misma localidad que ahora visita.
El 10 de mayo, el diseñador Cristo Báñez era encontrado muerto. El profesional de la moda, amigo íntimo de Eva González, fallecía en su domicilio y era enterrado en Almonte, el pueblo que le vio nacer y al que siempre había estado ligado. Hasta la localidad de Huelva, sus más íntimas, un sinfín de famosas, que se acercaban para brindarle el último adiós. Eva González no paró de llorar. Se abrazaba con unos, con otros. Sin entender por qué ya no tenía a su amigo al lado. Estaba deshecha.
La trágica muerte de su amigo del alma se suma a su mala racha en el terreno personal. El pasado año, Cayetano Rivera dejaba de vivir en la casa familiar en Sevilla. En 2020, Eva González y el torero tomaban la decisión de dejar Madrid para instalarse, definitivamente, en la capital hispalense. La ex modelo viajaría siempre que fuera necesario a Madrid para no renunciar a su carrera, pero su vida familiar se desarrollaría en la tierra que la vio nacer. Era una vuelta a sus raíces y a estar al lado de su hermana y de su madre, a las que siempre ha estado muy unidas. Pero el sueño se hizo añicos cuando las cosas empezaron a ir mal en el matrimonio, a pesar de haber hecho frente a numerosas crisis y supuestas infidelidades de él a ella; el matrimonio se rompía, para siempre, a finales de 2022. Ella se centró en su hijo y su carrera televisiva; y él se mudó a la finca de los Rivera, donde ha continuado con su proyecto de ser piloto.
El golpe definitivo llegó en abril de este año cuando se publicaron las primeras fotos de Cayetano Rivera de nuevo enamorado. El todavía marido de Eva González ha rehecho su vida al lado de una presentadora portuguesa, María Cerqueira, con la que ha sido visto viajando a Venecia y compartiendo cenas románticas. La escapada a Italia fue la confirmación absoluta de que él había pasado página y que ya no había marcha atrás.
En todo este tiempo, tanto uno como otro han compartido la misma estrategia, silencio absoluto. Ni para lo bueno, ni para lo malo. Nada de comentarios y rostros serios. Eva González se ha mostrado de lo más esquiva con la prensa, aunque en sus redes sociales se ha dejado ver feliz y serena.