La resaca emocional que deja una boda no solo es para los novios. Sus familiares y amigos más cercanos también ven en los días posteriores al enlace jornadas en las que asimilar todo lo vivido y en las que dejar atrás los nervios propios de los días previos y del día del evento. Sobre todo si es una boda con tantísima expectación como fue el caso de la de Tamara Falcó (41 años) e Íñigo Onieva (34 años). Los recién casados pusieron rumbo a su luna de miel a los pocos días del enlace, pero no son los únicos que están haciendo planes de relax con los que dejar atrás todo lo vivido en el enlace. Familiares como Ana Boyer (34 años) también han retomado su rutina veraniega para volver a su día a día
El plan de relax de Ana Boyer en casa de su madre
Ana Boyer ha demostrado esto con su último plan en casa de su madre. Desde que terminó la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, la hija pequeña de Isabel Preysler no ha salido de casa de su madre. Villa Meona ha sido el sitio escogido para desconectar del estrés que implicó el enlace de su hermana y ahora está aprovechando para relajarse al máximo. Así lo demostró con la fotografía que compartió en sus redes sociales, en la que aparecen sus hijos en el jardín con piscina de la casa de Isabel Preysler. Ana Boyer no ha dudado en mostrar días de desconexión en una de las zonas más privilegiadas de casa de la Preysler y en la mejor compañía, la de sus dos pequeños.
Pero este no ha sido el único plan que han compartido ella y su marido, Fernando Verdasco. Comidas en el jardín de casa de Isabel Preysler, momentos en la piscina o practicar algo de deporte, son las actividades de las que están disfrutando en familia.
Ana Boyer se despide de su hermano Julio José Iglesias
Ana Boyer se ha enfrentado también a una despedida, la de su hermano Julio Iglesias Jr., que ya se ha marchado de Madrid. Tal y como él mismo mostró en Instagram hace unos días, el cantante puso fin a unos días en casa de su madre. La boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva fue la oportunidad perfecta para que Isabel reúna en casa a casi todos sus hijos. Menos Enrique, que decidió no ir al enlace de su hermana, los demás sí que se han juntado. Pero ahora ha llegado el momento de las despedidas.
Isabel Preysler, ausente tras la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva
De la que no hay ni rastro, es de Isabel Preysler. Desde que el sábado 8 de julio apareció en la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva, ni se le ha vuelto a ver ni se ha pronunciado al respecto del gran día. Isabel ha seguido con la actitud que tomó en las semanas previas al enlace y que ha vuelto a tomar después de la boda, que es la de permanecer en un segundo plano, no hacer ruido y dejar todo el protagonismo a la pareja. En estos días, ha estado centrada en ejercer de anfitriona. Son varias las personas a las que ha recibido en su casa. Familiares a los que no suele ver a menudo pero que han viajado a Madrid para acudir al enlace. Entre ellos, su hija Chábeli.
La hija mayor de Isabel Preysler ha tomado la misma actitud que su madre. De todos sus hijos, Chábeli Iglesias es la más discreta. Desde que el enlace de su hermana con Íñigo Onieva llegó a su fin, tampoco ha habido rastro de ella. Junto a su marido y su hijo, ha tenido la oportunidad de disfrutar de su familia, pero ha preferido hacerlo con esa actitud discreta que tanto va con ella desde hace años. Porque al contrario de sus hermanas Tamara Falcó y Ana Boyer, hace tiempo que Chábeli decidió retirarse de la vida pública para vivir lo más relajada posible junto a su familia en Miami.
Tamara Falcó e Íñigo Onieva, lejos de ellos en su luna de miel
Los que están ajenos a todo lo que sucede en Villa Meona, son Tamara Falcó e Íñigo Onieva. El matrimonio se fue de luna de miel a Australia y tras unos días allí, han viajado a Sudáfrica. Tan solo tres días después de celebrar su boda, se les vio en el aeropuerto de Madrid para coger el avión con el que pusieron rumbo a uno de los viajes más especiales de su vida. Durante varias semanas, estarán recorriendo lugares idílicos para después volver a Madrid para atender un compromiso personal. Será entonces cuando vuelvan a reunirse con sus familiares y podrán hacer balance con ellos del día de su boda y de todas las celebraciones que rodearon al evento.