Patricia Pardo es de esa clase de profesionales para los que quedarse 'castigados' sin vacaciones no es, ni mucho menos, un problema. De ahí que esta comunicadora se enfrente, un año más, ya van tres, a la ardua tarea de sustituir a Ana Rosa en sus vacaciones de estío. "Para mí es un orgullo hacer el verano. Jamás en la vida renunciaría a un trabajo por unas vacaciones", ha dicho recientemente en una entrevista para Ecoteuve. Ella y Joaquín Prat, a quien considera "sin peloteo, el mejor presentador que hay en España", son los encargados de conducir 'El programa del Verano'.
¿Y qué opina de su 'jefa' Ana Rosa? Patricia es sincera y habla con mucho cariño de la reina de las mañanas de Telecinco. "Yo me siento muy apoyada por ella. Es como nuestra mamá porque nos sentimos como en una gran familia y nos da mucho cariño", ha afirmado en dicha entrevista.
¿Quieres conocer un poco más a 'la heredera' de AR? ¡Atentos a las pistas que os damos de ella!
Patricia es gallega, tiene 33 años y es lo que conoceríamos como una periodista de raza. Tras años trabajando como reportera, reconoce que le gusta estar donde se encuentra la noticia y que le prima poder narrarla ‘in situ’, micro en mano. Así aprendió, y así entiende la comunicación. Pero Pardo se desenvuelve con una soltura alucinante en cualquier medio, pues estar en un plató conduciendo un programa en directo de varias horas de duración también se le da de maravilla. Igual que manejar temas de sucesos, actualidad política o de sociedad. De hecho, fue haciendo corazón donde arrancó su carrera.
Empezó con unas prácticas en Mediapro, pero donde su rostro se ha hecho más conocido para el gran público ha sido en la competencia. Mediaset le dio la oportunidad de ejercer como reportera, uno de los oficios más duros, tal y como reconoció hace cinco años, pero que más soltura le hace adquirir a uno. Y fijaros si la consiguió que ahora es la sustituta oficial de Ana Rosa, pues es el tercer verano que se queda guardándole el sitio a ‘la jefa’ y haciendo todo lo que está en su mano para que la audiencia siga decantándose por ellos.
Precisamente hace dos veranos, vivió uno de los sustos mayores de su vida. Se encontraba embarazada y tuvo que abandonar su puesto por prescripción médica. Su hija, Aurora, llamada así en honor a su abuela (de quién heredó el carácter, asegura), parecía querer llegar antes de tiempo al mundo, por lo que tuvo que guardar reposo hasta su nacimiento.