En 'Sálvame' se hizo un informe acerca del papel de las WAGS (siglas en inglés de Esposas y Novias de Deportistas) como influencers en las redes sociales. Mujeres como Sara Carbonero, Vanessa Lorenzo, Pilar Rubio, Shakira... cuentan con cientos de miles de seguidores, algo que han sabido rentabilizar con muchas marcas comerciales. Kiko Hernández le preguntó a Alba Carrillo si ella no se aprovechó de ello mientras estuvo casada con Feliciano López. "No he sido muy inteligente en ese sentido. No supe gestionarlo", reconoció.
A Alba también le llegaban cantidad de productos y ella lo difundía en las redes sociales, sin llevarse ni un solo euro a cambio. "No le daba importancia. Por supuesto, me llegaban muchas cosas y yo las colgaba por hacerle un favor a la marca o a la persona que me lo enviaba. No he sabido negociar ni comerciar con esas cosas", dijo Alba.
Rafa Mora le comentó que quizá al separarse podría haber estado más al margen y no entrar al trapo con la separación, algo parecido a lo que hizo Jessica Bueno o Carla Pereyra. "Yo estaba enamorada y al separarme estaba despechada."
"Yo siempre he sido muy natural y lo que siento, lo digo. No todas comos iguales, o como Carla o Jessica", añadió Alba. En ese sentido, Gema López recordó que Alba respondía a preguntas en la calle, gratis, que muy bien podrían haber sido formuladas en un 'Deluxe' cobrando.
Pese a no ser una influencer en las redes sociales, Alba Carrillo no puede quejarse de su carrera televisiva. Una vez tratado todo lo de su ruptura con Feliciano López, Alba se ganó por méritos propios una plaza en 'Supervivientes' –fue segunda, por detrás de José Luis, el ganador– y, después, una silla en 'Sálvame'.