Como cada semana, Ana María Aldón ha hecho frente a los rumores sobre su futuro lejos de José Ortega Cano y el estado de su corazón desde el plató de 'Fiesta'. Muy emocionada por tener, al fin, las llaves de su nueva casa, la colaboradora no ha tenido reparos es hablar de la información que la relaciona con un alto directivo de Mediaset. Muy tajante, la andaluza ha negado la mayor: "No es cierto". Pero lejos de quedarse ahí, Ana María ha dejado claro que no es que no tenga ninguna relación sentimental con este misterioso caballero sino que no hay nadie en su vida en estos momentos: "No hay nadie, ni de arriba ni de abajo".
Los colaboradores de 'Fiesta' han empezado a bromear dando más detalles de este desconocido hombre para el gran público y antes de que se les fuera de las manos Emma García cortaba de manera radical la charla: "Además de atractivo es muy majo, pero vamos a dejarlo porque tiene pareja", zanjaba.
Aunque lo de esta amistad especial no sea cierto, Ana María ha anunciado abiertamente que no está cerrada al amor. Así se lo ha confirmado a sus compañeros: "Claro que tengo ganas de ilusionarme". La diseñadora, de 45 años, encara el nuevo año con mucha ilusión. Una nueva etapa en la que promete ser la casa de sus sueños que compartirá con su hijo y todos sus seres queridos.
Todos los detalles del convenio regulador de Ana María y José Ortega Cano
El matrimonio entre Ana María Aldón y José Ortega Cano ya es cosa del pasado. De mutuo acuerdo, la pareja decidía poner punto y final a más de una década juntos con un acuerdo centrado en el bienestar del único hijo que tienen en común. Este sábado, el 'Deluxe' hacía públicos los puntos del convenio regulador de divorcio que ahora tendrán que ratificar frente a un juez, una serie de condiciones que no han creado ningún malestar en la expareja: Tendrán la custodia compartida de su hijo por semanas, José Ortega Cano pagará una manutención de 1.000 euros al mes, harán frente a los gastos extraordinarios de manera compartida.
Hasta aquí todo más o menos normal. Uno de los puntos especiales es que Ortega Cano ha expuesto su deseo de hacer frente a los gastos de educación de su hijo pequeño incluso después de fallecer y, finalmente, tal y como adelantó Ana María Aldón ha renunciado a la pensión compensatoria durante los años en los que dejó de trabajar para hacerse cargo de su hijo.