Este 2024 está siendo un año de lo más intenso para Arantxa del Sol (52 años), que volvió a saltar a la palestra gracias a su participación en ‘Supervivientes 2024’, reality donde pasó por todo tipo de emociones pero que acabó con ella siendo vetada del plató del concurso tras conocerse la agresión física que tuvo con Ángel Cristo Jr. Con esta aventura, Arantxa pretendía retomar su papel de presentadora, ese que la hizo famosa en la década de los noventa, pero parece que esto todavía no ha podido ser, estando inmersa en su relación con su marido, Finito de Córdoba, y en disfrutar de todos los planes que puede con su hija Lucía. Los tres viven en paz y armonía junto a su otro hijo, Rodrigo, en su casa de Córdoba, un hogar del que hoy queremos abrir sus puertas.
La impresionante casa de Arantxa del Sol y Finito de Córdoba
El matrimonio se juraba amor eterno en el año 2001, momento en el que pasaron por el altar y comenzaban su nueva vida de casados en Madrid. Años después decidían dejar la capital atrás para asentarse en Córdoba, ciudad natal del marido de Arantxa, donde han conseguido crear un hogar junto a sus hijos. La familia vive en una espectacular finca con muchos metros cuadrados en la que disfrutan de un increíble jardín, terraza y otros detalles que nos han conquistado nada más verlos.
En este jardín tanto el matrimonio como sus hijos parecen disfrutar al máximo del aire libre y de la calidad de vida que les ofrece tener este tipo de espacios y de una terraza, un lujo del que no todos podemos gozar.
Una piscina olímpica
En esta finca donde tienen la vivienda podemos ver, gracias a diferentes fotografías que ha compartido la presentadora, que Arantxa y su familia disfruta de una enorme piscina olímpica situada dentro de la parcela comunitaria donde residen. Un refugio de paz donde poder divertirse y relajarse, así como también refrescarse cuando las temperaturas del verano se vuelven insoportables y necesitan un poco de agua fresca para volver a estar en sintonía. Además, también hemos podido ver como la propia Arantxa posa siempre que puede con este increíble paraíso azul de fondo, uno de sus favoritos en la época estival.
Una cocina blanco impoluto
En otra de las publicaciones de Arantxa hemos podido ver su increíble cocina, compuesta por muebles de color blanco acabados en brillo y una encimera en este mismo tono. Además, parte del salpicadero está creado en este mismo color, siendo una extensión de la encimera, una elección diferente y muy moderna. Esta sencilla y elegante estancia también destaca por su pared pintada de color gris y el enorme cuadro que reposa en esta, una obra con los colores gris marengo y dorado que destaca mucho entre la sencillez del lugar.
La terraza de Arantxa
Además de todas estas comodidades, la presentadora cuenta también con una increíble terraza en la que dispone de unos sillones para descansar y desconectar. Un rincón perfecto para leer, meditar o simplemente mantener una distendida charla con tus seres queridos. Estos son de un material resistente al agua, necesario al estar a la intemperie, y cuentan con unos cojines grandes en color blanco que ha combinado con otros más oscuros pero igual de elegantes.
Y en este mismo espacio podemos ver la gran cristalera que da al jardín desde el salón, una terraza donde también encontramos una gran mesa de exterior de madera con sillas a juego. Sin duda, un lugar fabuloso donde poder llevar a cabo diferentes reuniones familiares o de amigos y en el que Arantxa suele disfrutar de sus desayunos saludables. Además, una gran planta decora la terraza, siendo un paraíso verde que te hace sentir en plena naturaleza.
El salón de la casa
La decoración del salón de Arantxa es mucho más oscura de lo que podríamos imaginar, destacando un mueble aparador que luce bastante antiguo, encima del cual han colocado un par de vasijas igual de arcaicas y lo que parece ser el esqueleto de la cabeza de un toro. Además, un enorme cuadro en tonos tierra adorna la pared de la estancia, en la que destaca mucho la alfombra de rafia y una butaca de mimbre con un cojín en tonos rojos. Lo poco que se ve e intuye del sofá, parece que esta pieza es una en color verde oliva, muy en consonancia con el resto de tonalidades del salón.