“David no lo sabía”. Elena Tablada ha roto su silencio. La diseñadora no ha dudado en poner todas las cartas sobre la mesa y sincerarse incluso sobre aspectos que, hasta ahora, había decidido callar. “Todo esto empezó cuando nació Camila”, explicaba Tablada. La ruptura con Javier Ungría encontraba su punto álgido en el momento en que este se refirió a la hija mayor de la diseñadora, a la que tuvo con su anterior pareja, David Bisbal.
Tablada se arma de valor y pone las cartas sobre la mesa. Es el momento de explicar muchas cosas que harán que se entiendan otras muchas. “Te tienes que ir”, asegura Elena Tablada que le dijo a Javier Ungría después de una confesión que decidió ocultar a David Bisbal. El padre de la criatura nunca supo, al menos durante la relación de Tablada y Ungría, lo que estaba pasando en casa de su ex.
La terrible confesión de Javier Ungría sobre la hija de Elena Tablada
“Tenemos que hablar”, le dijo Javier Ungría a la que era, por aquel entonces, su pareja. Elena Tablada lo narra en la última entrega de ‘Me quedo conmigo’. “Nunca más voy a hacer un viaje con Ella, le he cogido manía. Hay cosas que hace que no aguanto y hay cosas que no hace que no aguanto también”. Es una confesión tan descarnada, tan terrible, que muchos pensarán que no puede ser cierta.
Elena Tablada se quedó de piedra. “Yo seguía pensando que él tenía que madurar, que no podía ser así, no me entraba en la cabeza”, afirmaba en el programa. La diseñadora optó por ocultarle este sentimiento a David Bisbal y pedirle a Javier Ungría que recogiese sus cosas y se marchase. "Ella es una niña muy buena, muy calladita, no es contestona”, se lamenta. Su hija fue el objeto de las declaraciones de Ungría que dinamitaron el matrimonio.
No fue hasta el momento en el que Tablada decidió poner fin a la relación cuando se sinceró con David Bisbal “Oye mira, la relación entre Javier y Ella no está fluyendo como a mí me gustaría”, explica que le dijo al cantante. El nacimiento de Camila había hecho que Ungría le cogiese manía a su hija mayor, algo que no iba a tolerar bajo ningún concepto.
El dolor por su hija Ella Bisbal
Tablada reconoce el enorme dolor que sentía por su hija cuando supo lo que pemnsaba el que era, entonces, su marido. "Ella normalizaba que eso fuese así desde que nació Camila. A mí se me partía el corazón. Cuando me dijo eso le dije que se tenía que ir. Por no fracasar otra vez, por no romper esto, seguía intentándolo", ha contado la diseñadora en el programa. Y es que la afirmación que habría dicho el empresario era tan demoledora que Tablada no se atrevía ni a confesarlo.
Dos años después, Tablada reconoce que fue lo mejor que le podía haber pasado. "Me di cuenta que estaba haciendo lo mismo que hacía mi madre. Si tú le dices a una madre eso de su hija, teniendo un hijo ya, no estás empatizando. Es una bestialidad decirle eso a una persona", afirmaba tajante. Fue el punto en el que el divorcio de la diseñadora y el empresario llegó a un punto de no retorno. Nada podía ya hacerse para salvar lo suyo. Luego empezó la batalla legal.
Elena Tablada salía victoriosa del enfrentamiento que vivió con su exmarido. Una agria batalla en los tribunales que iba amenizada con cruces de acusaciones ante los medios. La diseñadora veía, además, como Javier Ungría decidía dar el paso y convertirse en concursante de la última edición de 'Supervivientes'. Un paso al frente que nunca había querido dar y que hacía que el empresario se erigiese como personaje popular por derecho propio.