Hoy es uno de los días más esperados y especiales para Ana Cristina Portillo (31 años), que por fin va a casarse con su pareja desde hace siete años, Santiago Camacho. La diseñadora, hija de la desaparecida Sandra Domecq, está celebrando este especial enlace en Jerez de la Frontera, localidad gaditana en la que también conoció a su pareja y futuro marido durante la feria del lugar. Para el vestido, uno de los más especiales de su vida, la joven diseñadora ha contado con la ayuda de un conocido modisto español, apostando por el talento nacional para este día tan emotivo en el que ha sorprendido con su sofisticado vestido de novia.
El vestido de novia de Ana Cristina Portillo
Nada más verla llegar a la Catedral de Jerez de la Frontera, el mismo lugar donde fue bautizada y recibió la primera comunión, hemos podido ver el increíble vestido de novia de Ana Cristina, que llegaba acompañada de su padre, el empresario y fotógrafo gaditano Fernando Portillo, que la ha llevado del brazo muy emocionado hasta el altar.
Vestida de Jorge Acuña, modisto que ha realizado este traje tan especial, la joven ha sorprendido con una pieza en muselina de seda con cuerpo asimétrico drapeado y unos llamativos bordados en plata realizados a mano sobre este cuerpo. Tal y como informan desde ‘¡Hola!’, Ana Cristina ha tenido clara su inspiración para este traje desde el principio: la Grecia clásica. El propio diseñador lo comentaba así al citado medio, informando que a Ana Cristina le gusta tanto este estilo y se siente tan identificada con él que "optamos por la asimetría en el escote, un drapeado realizado a mano que recordase a la técnica de Fidias, un bordado realizado a mano por Victoria, de Luneville, que diese textura, relieve y luz, un tejido muy ligero y vaporoso, grandes capas que dotasen de movimiento a la silueta, además de hacer de cola y sustituir al velo".
Esta capa, que también ha hecho las veces de velo, ha sido uno de los detalles más llamativos de este look, siendo bastante bonito ver como, para su entrada a la iglesia, sus hermanas, Claudia, Eugenia y Alejandra Osborne, no han dudado en coger esta capa y la han ayudado en su gran y destacada entrada.
Además, para completar el estilismo, la diseñadora ha optado por llevar unos increíbles pendientes de diamantes de Rabat, el modelo chandelier, compuesto por oro blanco con diamantes en talla pera y brillante, eligiendo como calzado unos elegantes zapatos plateados de Stuart Weitzman.
Jorge Acuña habla del proceso de creación del vestido
Tal y como mencionan en este medio, Ana Cristina no quería sentirse disfrazada, recurriendo a este diseñador para que la ayudase a dar con uno de los vestidos más importantes de su vida. "Quiero mucho a Ana Cristina, así que me alegré muchísimo por ella y me sentí muy honrado porque quisiera confiarme la creación de su vestido de novia”, confesaba Jorge, añadiendo que "cuando vino Ana Cristina a mi atelier por primera vez me impresionaron mucho su madurez, su dulzura y su belleza. Pronto nos hicimos muy amigos también y sí, he tenido la suerte de vestirla en muchas ocasiones".
Los looks de las hermanas de la novia
A las puertas de la Catedral de Jerez de la Frontera hemos ido viendo llegar a todos los invitados, que han sacado sus mejores galas a pasear para este especial día. Por supuesto, de los looks más esperados en este enlace eran los de sus hermanas, que han llegado vestidas con diferentes trajes confeccionados con telas diseñadas por la propia Ana Cristina, creadora de la marca Ana Cristina Portillo Domecq Design. Sin duda, un gesto y un detalle de lo más especial que seguro ha emocionado bastante a la gran protagonista del día.
La celebración después de la boda
Una vez haya finalizado la ceremonia religiosa, tal y como informan desde ‘Vanitatis’, el recién estrenado matrimonio y sus invitados, entre los que también estará Bertín Osborne, se trasladarán a la finca Santiago, ubicada a las afueras de Jerez y que es propiedad de la familia Domecq-Williams, donde disfrutarán del banquete.
Esta finca, muy especial para toda la familia, fue la casa de los abuelos de la novia, el bodeguero Beltrán Domecq González y su mujer, Ana Cristina Williams, y también fue el lugar elegido por sus hermanas para celebrar sus banquetes de boda. Para este día, Ana Cristina quiere optar por celebrar un enlace íntimo y sencillo en el jardín que rodea esta casa.