El último año ha convertido a Pablo López en uno de los personajes del momento. Su papel como coach en la recién terminada edición de La Voz, el lanzamiento de su disco ‘Camino, Fuego y Libertad’, la ruptura con su novia de toda la vida y los rumores de una relación sentimental con Malú son sólo algunos de los puntos que han hecho de su personaje algo más que un cantante cualquiera y, lejos de asustarse, López ha demostrado que sabe como surfear la fama.
Con mucho más que el nombre en común, Pablo López y Pablo Alborán son íntimos amigos desde hace ya muchos años. Músicos y malagueños ambos, la complicidad entre los andaluces es más que evidente y el protagonista no dudó en contar algunos detalles de esa amistad que tantas pasiones despierta: “Luego Pablo me mandará un whatsapp diciéndome que por qué cuento estas cosas” respondía López a Motos tras la primera pregunta sobre Alborán. “Me escribe hace unas semanas cuando estaba de gira por Latinoamerica, que la verdad es que se mata el doble que yo a trabajar, que soy más flojo, y me dijo que me reservara para salir un día. Y cuando nos vimos fue como esas parejas que llevan tiempo sin verse y se van corriendo a un hotel: los dos nos fuimos al estudio a machacarnos”.
El que fuera concursante de una de las ediciones de Operación Triunfo quiso aclarar la fama de ‘fiestero’ que le persigue y contó que él no es de salir por la noche: “Lo que pasó de verdad en este disco es que pasaba muchas noches en el estudio hasta muy tarde y salía con adrenalina y me iba a un bar de Madrid que me gustaba mucho porque si llegaba a casa me pitaba todo”.
Aún así, la anécdota divertida llegó con la confesión del truco que tiene para poder trasnochar sin preocupar a su familia y amigos y no es otro que “una buena colección de fotos de camas de hoteles para confundir", reconociendo que suele subir fotos con las mismas en sus redes para que nadie sepa cuando sale de fiesta y se preocupen por él.