Nunca lo habíamos visto tan emocionado. El príncipe Harry se reunía en Buckingham con algunos soldados veteranos de guerra, pero fue con una en especial, Kristie Ennis, con la que los ojos se le inundaron de lágrimas. Para él era muy importante el servicio que habían prestado todos estos hombres y mujeres en Afganistan y cuando Kristie le quiso entregar la chapa de un compañero fallecido en combate, él no pudo contener el llanto.
Kristie quería darle la chapa con la identificación del cabo Baune. Un joven que falleció en el año 2012 cuando estaba en acto de servicio. En un principio, Harry no quiso aceptar la medalla, pero Kristie insistió. La joven aseguraba que a su compañero nada le haría más ilusión que su identificación la tuviera alguien de la familia real, especialmente Harry, que ha estado en el ejercito y sabe lo que se vive en durante un conflicto bélico.
Kristie vivió un accidente de helicóptero, por el que le tendrán que hacer una gran operación. A Ennis le amputarán una de sus piernas próximamente, de hecho, tendría que haber sido cuando estaba fijada la visita del príncipe, pero pidió que se lo retrasaran para que ella pudiera asistir al encuentro con Harry. Quería decirle lo importante que es para ella y, sobre todo, darle la placa de Baune.
El príncipe se ha reunido con los veteranos que llevan andando 72 días para recaudar fondos para todos los heridos de guerra. Se trata de uno de los gestos más solidarios que hemos visto de Harry, pero es que este tema le toca especialmente, puesto que cumplió servicio militar en Afganistán en dos ocasiones, primero entre 2007 y 2008, y después en 2012-13. Ha asegurado que mientras que estuvo de misión jamás recibió un trato de favoritismo, y que no habría sido lo mismo sin sus compañeros.