Tamara Falcó anunció hace una semana en 'El Hormiguero' que empezaba a estudiar cocina en una de las escuelas gastronómicas más importantes y glamourosas y se comprometía con su jefe, Pablo Motos, y sus compañeros de trabajo en 'El Hormiguero' en agasajarles esta semana con una tarta de chocolate hecha por ella misma. Y lo ha cumplido.

Tamara Falcó ha quedado genial en su trabajo pero a la vez ha destruido a su madre Isabel Preysler. La casi marquesa de Griñón ha querido sorprender a Motos con la tarta favorita de su madre y de la que disfruta cada fin de semana en Villa Meona y ha desvelado la gran mentira que escondía este dulce.