Lourdes Montes se ha salido con la suya. En cuanto supieron que el bebé que venía en camino sería un niño, el nombre de Frascisco pareció no negociable para Fran Rivera y su mujer, igual que tampoco lo ha sido la manera de abreviar el nombre. Desde el principio, su madre le empezó a llamar Curro, “Francisco es un nombre muy grande para un niño tan pequeño, es demasiado serio”, pero su padre insistía en lo contrario.
El extorero se ha mostrado poco amigo de abreviar el nombre de su hijo porque no quería que le pasara lo que a él. A Rivera se le quedó el “Fran” desde bien pequeño y ahora volver a la versión larga le resulta imposible. Pero lo cierto es que hay tantos Franciscos en su familia que, para diferenciarse uno de otros, es normal que se recurran a diferentes fórmulas. Estuvo el Francisco Rivera pionero, ‘Paquirri’, después Fran, tras él y ya en su matrimonio con Isabel Pantoja, Kiko, y, después, este también llamó así a su primer hijo con Jessica Bueno, solo que en su versión con diminutivo, Francisquito. Para la nueva generación que estaba por nacer, Lourdes encontró una solución, “Curro”, que ella adora y que su padre detesta pero que, al final, se tendrá que hacer a ella.
Una de las primeras declaraciones de padre por tercera vez ha sido asegurar que lo del nombre “es una guerra que tiene perdida” y que ha asumido que su hijo varón será conocido como Curro Rivera Montes.
La diseñadora, pacificadora, hace solo dos meses llegaba a una solución: “Que cada uno le llame como quiera".