El detalle íntimo del que Anna Ferrer ha sido consciente desde que es becaria de Telecinco

Anna Ferrer, hija de Paz Padilla, está sacándole todo el partido a la nueva etapa profesional que ha estrenado recientemente. Tal como publicó en exclusiva 'Lecturas', la 'influencer ha 'fichado' como becaria en Telecinco, convirtiéndose en compañera de trabajo de su madre. Anna no puede estar más ilusionada con la oportunidad que se le ha abierto, empapándose de valiosos conocimientos y adquiriendo experiencia. Precisamente ha sido en un momento de la intensa jornada de trabajo cuando un pensamiento ha tomado todo el protagonismo en su cabeza y, ya en la tranquilidad de su hogar, lo ha compartido con sus seguidores. A la hija de la presentadora de Mediaset la ha inundado un profundo sentimiento de felicidad al ser consciente de un íntimo detalle sobre las metas que ha conseguido a base de esfuerzo y perseverancia.

Como la mayoría de niñas, Anna no era una excepción y ya proyectaba la vida que imaginaba que tendría de adulta. De esta manera tan gráfica lo ha expresado en un sincero texto que ha publicado en un 'story' de Instagram: "Esta mañana, mientras estaba en la oficina me ha venido a la cabeza la de veces que pensaba de pequeña cómo sería mi vida cuando fuera mayor. Me imaginaba en una oficina metiendo cosas en el ordenador y archivando papeles. Me veía independiente, con mi carrera, mi trabajo, mi coche, mi melena larga, y mil modelitos de ropa, yendo con mis amigos a cenar, de fiesta...". El umbral que cada persona se marca en sus objetivos vitales es muy personal, y como la 'influencer' afirma desenfadada: "Sé que son cosas superficiales, pero era una niña que se pasaba el día jugando con Barbies, ¿qué imagen iba a tener? ¡Ja, ja, ja!".

Sin embargo, ha habido un aspecto del balance que ha hecho que la ha emocionado especialmente. Y es que ha "caído en que todo eso es lo que soy ahora". Para Anna ha sido muy importante ser consciente de que ha cumplido un sueño importante en su vida y ha animado a sus seguidores a que no tiren la toalla para conseguir los suyos. "Proyecta lo que quieres y lucha, lucha, lucha, lucha, lucha y lucha, y llegarás donde quieras", escribía. Finalmente, ha cerrado su reflexión con un sabio y conmovedor consejo: "En el camino no descuides a los tuyos, porque ¿de qué sirve triunfar si no tienes con quién compartirlo?". Seguro que Paz está muy orgullosa de los valores y las lecciones que ha aprendido su hija.