El destino (y la actitud) de Vicky Martín Berrocal y Enrique Solís en su última escapada

Aunque no se haya hecho oficial por boca de los protagonistas, parece que la amistad entre Vicky Martín Berrocal (51 años) y Enrique Solís (34 años) es cada vez más fuerte. La diseñadora y el abogado llevan tiempo acaparando titulares debido a ese posible noviazgo que los habría unido desde hace poco. En este tiempo hemos sido testigos de algunas de sus escapadas más románticas como esa que hicieron a Roma, habiendo viajado recientemente a Sevilla para acudir a la Feria de Abril o a San Sebastián, donde se alojaron en uno de los hoteles más lujosos de la ciudad. Ahora, mientras Vicky sigue triunfando con su podcast ‘A solas’, cuya tercera temporada inauguró entrevistando a Victoria Federica (23 años), parece que la pareja ha vuelto a bajar al sur para su nueva escapada.

El último y romántico viaje de Vicky Martín Berrocal y Enrique Solís

Parece que Vicky y Enrique han querido disfrutar de estas temperaturas tan agradables que estamos viviendo en España escapándose unos días a la capital de la Costa del Sol. Durante su estancia en Marbella pudimos verles muy cómplices llegando a la estación, donde ambos optaron por vestir americanas, combinándolas de maneras muy distintas. Mientras que Enrique optó por ese estilo tan clásico y conservador al que nos tiene acostumbrados, Vicky optó por un look casual compuesto por un pantalón ancho en color beige con camiseta básica blanca que elevó gracias a una americana negra oversize.

Si con esto no fuese suficiente, Vicky volvió a demostrar su gran saber a la hora de vestir y lo combinó con una gorra y un bolso midi acolchado negro. Para el calzado, ambos decidieron llevar algo cómodo, decantándose por unas zapatillas. Las temperaturas eran tan altas que, durante su comida, ambos tuvieron que deshacerse de sus americanas, llegando a ver a Vicky abanicándose. Tal y como podemos ver en estas imágenes, ambos parecen sentirse especialmente cómodos el uno al lado del otro, transmitiendo una total tranquilidad cuando están juntos.

La nueva vida de Vicky Martín Berrocal junto a Enrique Solís

Desde que ha comenzado esta relación con el propietario de los Hoteles One Shot, parece que Vicky esté viviendo una segunda adolescencia. En su Instagram se muestra muy sonriente y sus looks son cada vez más casual y divertidos, apostando incluso por algunos como este que subió hace apenas unas horas. Sin duda, un outfit muy juvenil que podría ser una gran muestra de cómo se siente ahora mismo la diseñadora, inmersa en esta nueva aventura amorosa junto al hijo de Carmen Tello. Junto a este, parece que Vicky se siente segura y cómoda, sentimientos que transmite en las imágenes que cuelga en sus redes e incluso en los vídeos de su podcast, donde podemos ver a una Vicky de lo más natural.

 

 

 

 

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Enrique Solís, denunciado por una mujer

En mitad de este cuento de hadas que vive la pareja, no es todo tan bonito, ya que hace apenas unos días nos enterábamos de una noticia que no habría sentado nada bien a la nueva ilusión de Vicky. Al parecer, durante este viaje exprés a Marbella, Enrique y la diseñadora no sólo han tenido que hacer frente al hecho de que los paparazzi y la prensa local haya querido fotografiarles, al parecer alguna persona que ha coincidido con ellos también intentó hacer lo propio con su teléfono móvil. Este es el caso de una mujer que no dudó en fotografiarles con su aparato, algo que no fue del agrado de Enrique, que acabó enfrentándose a ella. Tras este altercado, la discusión subió tanto de tono que tuvo que llegar a intervenir la policía, lo que acabó con una denuncia por parte de la mujer hacia el abogado.

Según informan en la revista ‘Semana’, esto ocurrió cuando Vicky estaba celebrando (otra vez) su cumpleaños en un conocido hotel de la ciudad andaluza con su círculo más íntimo a su lado, momento en que Solís vio a esta mujer grabando y no dudó en recriminarle “de muy malas formas” lo que estaba haciendo. Al parecer, según este medio, la denunciante asegura que estaba “tan tranquila bailando y pasándolo bien” junto a sus amigas y que no estaba grabando a Enrique, al cual asegura no conocer de nada. Esta le acusa de haberla empujado y “quitado el teléfono de las manos” para intentar eliminar él mismo las pruebas en forma de vídeos y fotografías. La mujer no entendió este comportamiento ya que, como ella explicó,“todo el mundo estaba con su móvil en la mano grabando, porque era el aniversario del local y en el momento que ocurrieron los hechos era cuando la tarta se repartía en el establecimiento”, asegura. Esta confirmó haberse sentido "privada a su derecho a la intimidad, viendo vulnerados sus fotos y vídeos más íntimos" ya que "este señor, Enrique Solís, consideró, por su cuenta y riesgo borrarlos tras el hurto de mi teléfono, negándose a devolvérmelo".