Descubrimos a los nuevos concursantes de 'Ven a cenar conmigo: Gourmet Edition'

Dos modelos, un cantante y un presentador forman el elenco de la segunda temporada del concurso de cocina VIP

La primera temporada de ‘Ven a cenar contigo: Gourmet Edition’ conquistó a miles de espectadores al meterse en la cocina de cuatro famosos nacionales. Cuatro capítulos que nos permitieron conocer aún más Lucía Etxebarría, Víctor Janeiro, Rappel y a Ana Obregón y que no dejaron indiferentes a nadie. Además de los buenos momentos en la mesa, pudimos comprobar que la bióloga, que se hizo con el premio, debería plantearse renovar la cocina y que a Víctor Janeiro le costaría subsistir por sí mismo debido a sus pocas habilidades culinarias.

Apenas han pasado unos días del fin del programa, que ganó la polifacética Ana, y desde Mediaset ya se ha anunciado una segunda temporada. Aunque todavía no hay fecha de estreno, sí que se sabe el nombre de sus nuevos protagonistas, cuatro nuevos famosos que, sin conocerse entre sí, tendrán que demostrar sus habilidades para hacerse con el premio, valorado en 3.000 euros.

Parece que Alessandro Lecquio, sin formar parte, va a volver a ser uno de los protagonistas pues participará su otra ex, Antonia Dell’atte. La italiana intentará superar a Ana Obregón, antaño su gran enemiga y que ganó gracias a unos spaghetti Lecquio Style, ¿se atreverá ella con un tiramisú al Alessandro?

A falta de una modelo, tendremos dos y es que Alba Carrillo regresa a televisión tras su brevísimo paso por Sálvame. Madre de un hijo y mujer sana, la ex de Feliciano López se esmerará para, seguramente, sorprender con un plato sano que irá acompañado de un postre tan goloso como ella. El punto más macarra recaerá en el cantante Fortu, miembro de Obus y el de sosiego a Óscar Martínez, que por su faceta de presentador está acostumbrado a casi cualquier tipo de situación.

Una vez más, el actor Luis Larrodera estará al frente de los comentarios y no dudará en poner su toque mordaz, irónico y sobre todo muy divertido para convertirse una vez más en el narrador imprescindible de cada velada.