La guerra entre Elena Tablada, David Bisbal y Rosanna Zanetti sigue en todo lo alto, aunque todos insisten en que quieren zanjar el tema. No lo parece, la verdad. Elena Tablada, cuando queda un mes para su boda cubana con Javier Ungría, se despachó en una revista acusando a David de no haberle dado su lugar durante los siete años que duró su relación, así como la actitud, que no le gustó, de parte del entorno del cantante cuando se quedó embarazada de la hija de ambos, y de la soledad que sintió cuando nació la pequeña.
Y, claro, David Bisbal no ha tardado en contestar. Fue a su llegada al aeropuerto de Madrid, a su regreso de Barcelona, ciudad a la que viajó para participar en la última gala de 'OT'. De sus palabras se deduce que está demasiado feliz para enfadarse, pero lanzó una nueva pulla hacia Elena Tablada. Pese a que en un principio parece que intenta suavizar la situación, realmente le echa más gasolina al fuego. "Nunca voy a contestar a las declaraciones de la madre de mi hija, si tengo algo que decirle tengo su mail y su teléfono, nunca se me ocurriría hacer algo público sobre todo porque estoy en la situación más feliz de mi vida", dijo el cantante.
"Yo nunca me he manifestado porque mi trabajo es la música. No tengo que decir nada más, no es mi estilo ni voy a cobrar dinero de esto porque nunca lo he hecho, eso son otras personas", añadió David. Estas palabras no habrán sentado nada bien a Elena Tablada, que se indignó cuando el almeriense la acusó de "mercadear" con su hija, algo que, afirma, nunca ha hecho ni hará.
Viendo los derroteros que está tomando esta no-relación entre Tablada y Bisbal, mucho nos tememos que no será este el último capítulo de esta guerra en la que, no lo olvidemos, hay una menor de por medio que no tiene la culpa de nada. Ojalá por el bien de la niña, sus famosos padres aparquen sus diferencias.