¿Daniel Sancho tuvo cómplices? Nuevos datos salen a la luz

La policía tailandesa publica información a cuenta gotas, pruebas que podrían dar un giro de 180 grados el caso de Daniel Sancho

JC
José Confuso

Director digital de Lecturas

Daniel Sancho
Gtres

No es la primera vez que se apunta. Pese a que desde la policía de Tailandia se ha insistido en que el caso de Daniel Sancho (29 años) se encuentra prácticamente cerrado -así incluso lo transmitía el propio protagonista en una conversación telefónica antes de su ingreso en prisión-, nada más cerca de la realidad.  No será hasta dentro de un máximo de 84 días cuando finalice el período de prisión preventiva del hijo de Rodolfo Sancho. Por otro, las autoridades policiales siguen a la espera de los resultados de varias pruebas que determinarían aspectos claves de la investigación -sin ir más lejos, poco se sabe de las pruebas de ADN de los restos encontrados-. Pero es que, además, había nuevos datos que podrían dar un giro completo al caso. ¿Estaba solo? ¿Ha tenido cómplices?

Tampoco es de extrañar que la familia del joven contemple esta nueva posibilidad. Este pasado viernes, Rodolfo Sancho y Silvia Bronchalo, padre del cocinero, contrataban los servicios de un despacho de abogados para ejercer de portavoces de la familia en los medios de comunicación. Una decisión lógica teniendo en cuenta la enorme repercusión que está teniendo el caso pero que deja intuir algo más. No se trata de una elección casual ni precipitada, dentro de la gravedad y la rapidez necesarias en un caso de esta magnitud. Esconde también una declaración de intenciones.

Nuevos datos en el caso de Daniel Sancho

Los integrantes del despacho que ha asumido la portavocía de la familia Sancho no son desconocidos para el gran público. Desde que saltase la noticia a los medios, han formado parte del plantel de expertos que ha comentado el transcurrir de los hechos y las filtraciones de informaciones a la prensa local. Mientras Carmen Balfagón acudía de forma asidua al programa que conduce Sandra Barneda en Telecinco, su compañero de despacho, Ramón Chipirrás, hacía lo propio en los programas de Antena 3. Dos expertos criminólogos y abogados que ahora, además, se encuentran vinculados a la familia del acusado.

Desde el primer momento, tanto Balfagón como Chipirrás han sostenido la teoría del cómplice en el asesinato de Edwin Arrieta. "Alguien más ha intervenido en esto, por tiempo y porque tenemos acceso a cierta información que nos dice que estos restos que han encontrado los sanitarios no los podía haber hecho una sola persona”, explicaba Chipirrás en el plató de 'Y ahora, Sonsoles'. Días antes había hecho lo propio su compañera de despacho en 'Así es la vida'. Ambos coincidían en afirmar que, tal y como se habían producido los hechos, la teoría del cómplice no podía ser descartada.

Ahora, ya vinculados a la familia Sancho y con, es de suponer, información directa por parte del abogado que asesora al hijo de Rodolfo Sancho en Tailandia, esto cobra todavía más relevancia. ¿Cuál es esa información a la que han tenido acceso que dejaría la puerta abierta a la presencia de más de una persona? ¿Con quién tuvo contacto Daniel Sancho en Tailandia además de con la víctima del asesinato? Nuevas incógnitas se presentan en un caso que dista de resolverse de forma sencilla y rápida.

La situación de Daniel Sancho en prisión

Los portavoces de la familia Sancho también aseguraban que el acusado había sufrido un bajón anímico y emocional desde su entrada a la cárcel. Algo completamente lógico y que resulta más plausible que esa aparente tranquilidad con la que se le veía durante la reconstrucción del crimen. Las duras condiciones de las cárceles tailandesas y la evidencia de encontrarse en una situación que no va cambiar en mucho tiempo -mínimo, en meses-, han pasado factura a la aparente integridad del hijo del actor.

Sancho se encuentra todavía en la zona de aislamiento de la prisión y es posible que continúe ahí pese a transcurrir el plazo de diez días establecido. El director del centro afirmaba que era una posibilidad sobre la mesa pues no podía garantizar la seguridad del preso ni que este no pudiese hacerse daño a sí mismo. Es por ello que puede que la próxima semana, el hijo de Rodolfo Sancho siga residiendo en la enfermería. Allí comparte celda con otros cuatro presos y, según se cuenta desde los medios tailandeses, practica yoga. Una imagen idílica que casa con el afán de ofrecer una imagen de Tailandia alejada de la fama que precede a sus prisiones.