El 80 cumpleaños de una reina suele ser una ocasión muy solemne y destacada. Sin embargo, el de la reina Sofía ha sido más bien una reunión de amigos y familia. La emérita tenía un único objetivo, que sus tres hijos y (casi) todos sus nietos estuvieran reunidos bajo el mismo techo, y así ha sido por primera vez en mucho tiempo. Y es que la implicación de la infanta Cristina y su marido Iñaki Urdangarín ha hecho que parte de la familia, en especial Letizia, se posicionaran en contra de ellos. Ahora parecen haber enterrado el hacha de guerra y, al menos por este día, comer juntos en paz.
La comida con motivo del 80 cumpleaños de la reina Sofía parece haber sido bastante tranquila. Para empezar, el menú no ha tenido nada de regio y parece sacado más de un comedor escolar que de la cocina de un palacio. La familia real y los amigos más íntimos de la reina han comido ensalada y pescado con arroz y verduras. De postre, una sencilla tarta de bizcocho, fresas y nata, la favorita de la homenajeada.
Además, toda la tensión que se ha acumulado estos meses anteriores entre la reina Sofía, la reina Letizia y la Infanta Cristina ha quedado, si no superada, al menos sí en un segundo plano. Incluso el rey Juan Carlos ha pronunciado un discurso en honor a su esposa que ha conseguido emocionarla y es que ha alabado su labor como reina, madre y abuela. El rey Felipe también ha dado un pequeño discurso agradeciendo a su madre su gran apoyo y ayuda estos años. La infanta Elena y todos los nietos de Sofía también han asistido al almuerzo.
Después, gran parte de los invitados se ha trasladado al concierto que ha ofrecido la Escuela Superior de Música Reina Sofía en honor de la reina. Allí hemos podido ver a Juan Carlos y Sofía juntos y a multitud de amigos y familiares de los monarcas como la infanta Pilar, Farah Diba o Plácido Domingo junto a su esposa.