Cristian Suescun está siendo, sin duda, el gran damnificado de la guerra abierta entre Sofía Suescun y Maite Galdeano. Madre e hija están viviendo uno de los momentos más duros de su vida, uno en el que no hace demasiado tiempo nadie se hubiera imaginado encontrarlas, pero que sin embargo llevaba cociéndose a fuego lento mucho tiempo. El principio del fin comenzó cuando Sofía fichó por 'Supervivientes All Stars' justo después de que su pareja Kiko Jiménez regresara de hacer lo propio en la edición normal del programa en Honduras. Estando ella fuera se hizo evidente que entre suegra y yerno existían fricciones, aunque no supimos de la dimensión de las mismas hasta que Maite Galdeano decidió explicar en redes sociales el episodio del salto de vaya, que marcó un antes y un después en la familia.
Para resumir y contextualizar; fue un momento en que, después de una discusión entre madre e hija, Sofía se marchó a casa de su hermano, Cristian, y desde allí según han contado urdieron un plan para pedir a Maite que se marchara unos días a su casa de Murcia y así poder respirar tranquila. Para ello le dijeron que lo había dejado con Kiko, y la de Pamplona marchó feliz, hasta que se dio cuenta de que esto no era así y el problema era con ella. Entonces decidió conducir hasta Madrid y al ver que habían cambiado las cerraduras optó por saltar la valla para poder coger sus cosas y hablar con su hija. Entonces saltaron las alarmas, se presentó en la casa la Guardia Civil y se llegó a poner una orden de protección contra Maite según el relato de la propia Sofía en ‘De viernes’.
Una vez ocurrido esto Galdeano lo contó todo a través de las redes sociales culpabilizando de la situación a Kiko, y dejando claro que no le gusta para su hija y que no cree que su relación sea sana. Sofía optó por hacer un único comunicado dejando claro que quería priorizar su salud mental y que estaba al lado de su pareja. Y por ahora, aunque todos han pasado por un plató para dar su versión de los hechos, la situación sigue estando más o menos como estaba hasta ahora. Maite enfrentada a Sofía y con el hacha de guerra levantado contra Kiko, mientras la pareja se niega a acercamiento alguno. Pero hay otro gran damnificado, y ese es Cristian Suescun.
La complicada historia de Cristian Suescun
El otro hijo de la de Pamplona se ha visto envuelto en esta historia porque inevitablemente se trata de su madre y de su hermana, con las que hasta ahora parecía tener una buena relación, aunque ya en el pasado Maite había comentado que durante un tiempo apenas tuvo contacto con él porque en la separación se fue con su padre y porque le recordaba mucho a este con el que las cosas no fueron nada bien. Ha llegado a decir que prefirió separar a los hermanos porque creía que Cristian perjudicaría a Sofía. Un comentario que a él le ha dolido mucho, tal como reveló en el ya citado programa al que fue el último en acudir.
Y precisamente allí, además de explicar la difícil relación que ha mantenido con su madre a lo largo de los años, habló de lo mal que se sentía, de que estaría siempre al lado de su hermana y por supuesto, del dinero. Quiso dejar claro que no necesita ni el de su madre, ni el de Sofía, y para eso explicó que tiene una casa pagada y un coche de cuarenta mil euros. Lecturas ha querido conocer un poco más acerca de esta información y hemos podido confirmar que además de la vivienda, que es un ático con dos habitaciones, dos baños, cocina abierta al salón y una enorme terraza con vistas a la naturaleza, también es propietario de un trastero y una plaza de garaje en el mismo edificio.
Tres propiedades de Cristian Suescun
Firmó la compra de las tres propiedades a la vez en octubre de 2023 y tal como afirmó, no consta que pese hipoteca alguna sobre ella. Está situada en una localidad de las afueras de Madrid, muy cerca de donde vive la superviviente, y si quisiera ponerla en venta en este momento según el precio por metro cuadrado, podría hacerlo por algo más de 200.000 euros. Aunque de momento esa no parece ser su intención. Todo ello consta a nombre de una sociedad dada de alta en 2021 y que en 2022 obtuvo beneficios por valor de 30.000 euros y un total activo, que en su mayor parte se debe a la vivienda, de 188.000.
Las cosas no le van mal, y parece que tiene claro que quiere continuar con su vida, con su relación casi recién estrenada con Dakota Tarraga, con la buena sintonía que mantiene con su hermana y con Kiko Jiménez, con el que es habitual verle, sobre todo, haciendo deporte, y por ahora alejado de su madre, con la que está muy dolido y a la que prefirió ni siquiera ver cuando coincidieron en el plató de ‘De viernes’, que es el lugar donde se han ido conociendo, de semana en semana, todos los detalles de este conflicto familiar que parece no tener fin.