Un tuit de la Policía Nacional hizo saltar en la noche de este sábado las alarmas: la ex esquiadora Blanca Fernández Ochoa está desaparecida desde hace más de una semana y se ha pedido máxima difusión para dar con su paradero. Fue el pasado 23 de agosto la última vez que se supo de la medallista olímpica, de 56 años y madre de dos hijos.
Su familia está muy preocupada y también sus amigos, como es el caso de la deportista Coral Bistuer, íntima amiga de la familia Fernández Ochoa. Coral habló con 'Sábado Deluxe" vía telefónica y mostró su preocupación por la suerte que hubiera podido correr su amiga.
"Estamos todos muy preocupados. Estoy perdida y así estamos toda la gente que la queremos, la noticia nos ha cogido con el pie cambiado. Es todo muy extraño", aseguró Coral.
La exluchadora de taekwondo reveló una conversación que mantuvo con ella muy inquietante. "Me dejó preocupada, me llamó la atención que no vino a una cena importante que hicimos las deportistas pioneras, la llamé y no me cogió el teléfono. Me mandó un mensaje días después en el que me decía: 'Coral, estoy pasando el peor eslalon de mi vida'. Ella está en un momento complicado, aunque me dijo: 'Sabes como soy y lo voy a superar".
Coral Bistuer añadió que Blanca "ha tenido problemillas, está en un momento no demasiado en alza, no estaba en su mejor momento pero de ahí a desaparecer…". También comentó que Blanca "es como si hubiera perdido su sitio en el mundo, no supo ubicarse en el mundo después de que Paco (su hermano) falleciera, sus matrimonios fallidos..".
En la actualidad, Blanca vive con su hermana. Toda la familia Fernández Ochoa es una piña. "Blanca estaba siendo ayudada por expertos. Ella no desaparece así, si se marcha siempre había algún tipo de contacto, no es normal", dijo Coral.
"La he llamado y da señal pero no lo cogen, y en whatsapp ya no aparece la última vez que ha estado en línea, antes sí", explicó Coral.