Maite Galdeano (55 años) estallaba como nunca contra Sofía Suescun (28 años) y Kiko Jiménez (32 años) después de que la influencer decidiera echar a su madre de su casa tras una fuerte discusión. Solo unas horas después, la joven se ha armado de valor para hacer pública la terrible situación en la que vive desde hace años.
"Llevo años intentando disimular y ocultar un grave problema pero ha llegado el momento de ser valiente y afrontarlo", así empieza un extenso comunicado en el que Sofía ha reconocido por primera vez la relación tóxica que mantenía con su madre. "No sé ni por donde empezar. Son muchísimos años de sufrimiento muy desagradables por parte de mi madre, basados en unos celos tóxicos e irracionales que han sobrepasado límites", ha contado Sofía completamente sobrepasada por la situación.
La influencer ha asegurado que el mes que ha permanecido en Honduras ha sido un auténtico regalo que le ha permitido alejarse por completo de la "gran pesadilla que llevo tantísimo tiempo arrastrando en mi casa".
Sofía Suescun, en plena guerra familiar, se posiciona al lado de Kiko Jiménez
Después de todo esto, Sofía Suescun ha tomado partido por su novio, Kiko Jiménez, y ha negado rotundamente todas las "barbaridades" que Maite ha dicho sobre él. Desde que el colaborador es un manipulador a un "terrorista emocional".
"Este Ser no se quiere ni a él mismo y tampoco quiere a mi hija. Le está perjudicando muchísimo en su salud mental. Está anulada totalmente y sola. (...) Es un tío frío, calculador, ha conseguido alejarla de su madre... lo único que quiere es su beneficio. Ese es él", apuntaba Maite haciendo evidente la animadversión que siente hacia el novio de su hija.
Finalmente, Sofía ha hecho un llamamiento alegando que su madre "no está bien y necesita ayuda urgente". Y aunque ella ha sido la primera que ha intentado cambiar esta situación tan desagradable, "siempre me encuentro con una negativa por su parte". La influencer ha pedido comprensión y calma en medio de una guerra familiar que solo acaba de empezar. "Necesito tiempo para gestionar esta situación pero hay algo que tengo muy claro y es que ante todo voy a priorizar mi felicidad y tranquilidad. Espero que me entendáis", sentenciaba.
Sofía Suescun sentencia su relación con su madre, Maite Galdeano
Con todo el dolor de su corazón, Sofía tomaba la determinación de eliminar cualquier tipo de conexión con su madre mientras consigue enmendar la situación. Era la propia Maite quien confesaba a través de Instagram que su hija le había bloqueado de WhatsApp. "Mi hija está tan anulada que él le obligó a bloquearme del WhatsApp. La rata también me ha bloqueado pero eso me da igual", explicaba.
La respuesta de Maite no era otra que romper su vínculo digital y les dejaba de seguir a ambos en redes sociales. "Os acabo de dejar de seguir, no me interesáis ya (...) Ya lo he asumido, estoy muy tranquila. Soy fuerte como el hierro (...) Ya no los tengo miedo, no os quiero ni ver. No pensaba que me ibas a hacer este daño, echándome de casa (...) Nos os voy a perdonar en la vida", sentenciaba.
Maite Galdeano se refugia en su casa de la playa
Hace solo unos días, Maite se mudaba a la casa que tienen en la playa junto a uno de sus perros, hasta ahí todo normal si en la noche de este miércoles no decidiera arremeter sin piedad contra Sofía y Kiko después de que ellos la echaran de su casa.
Más tranquila, la que también fuera concursante de 'Gran Hermano' ha querido dejar claro que lejos de lo que habían hecho creer el piso con vistas al mar es solo suyo. "Estoy encantada en este piso a estrenar, con el mar en frente (...) ¡Este piso es mío! Está a mi nombre y lo he comprado con mis dineros, que yo no soy una muerta de hambre como él [Kiko Jiménez]", ha exclamado.
Por si a alguien le quedaba alguna duda, Maite ha explicado que vendió la casa familiar en la que vivían en Pamplona y con ese dinero se compró este piso con vistas al mar. "A Sofía le hacía ilusión que dijese que es de ella y una madre lo hace. Pero este piso es mío, lo he pagado yo (...) Soy una mujer muy fuerte y resistente. Vida nueva. Estoy cada día más feliz, qué os den", sentenciaba.
Esta guerra familiar no ha hecho más que empezar. Tras las palabras de Maite y Sofía será el propio Kiko Jiménez quien se defenderá de las acusaciones de su suegra esta misma tarde en el programa 'Fiesta'. Por su parte, Christian Suescun, hermano de Sofía, prefiere mantenerse al margen del enfrentamiento y sigue disfrutando de unos días de vacaciones en Ribadeo (Lugo).
Kiko Jiménez da la cara y explica qué ha ocurrido
"Yo estoy mal, pero quien más me preocupa es Sofía. Sofía lo está pasando realmente mal, es todo muy delicado". Kiko Jiménez reaparecía horas después en el programa 'Fiesta'. Muy afectado y al borde de las lágrimas, mostraba una imagen muy poco usual. "Esto no es un circo, Maite no está bien, necesita ayuda. No quiero entrar en el tema por respeto a Sofía. Yo no he echado a nadie de casa, esto es un tema de ellas dos. Tiene un brote de celos y no quiere que nadie se acerque a su hija. Ni yo, ni manolito ni nadie, Nadie. Y en ese brote dice barbaridades que duelen".
"Todo pasó el domingo", explicaba el exsuperviviente. "Recibí una llamada de Sofía con un ataque de ansiedad. Pero esto no ha sido cosa de un día... Todos hemos visto cómo es la relación entre madre e hija e, incluso, conmigo. Es un tema muy delicado. Debería ponerse en manos de profesionales porque si ocurre una desgracia luego nos echaremos las manos a la cabeza". Kiko ha dejado muy claro que Sofía ya no va a dejar pasar nada más. Ha dicho basta. "Estamos estudiando todo lo que Maite está diciendo y tomaremos las medidas que tengamos que tomar. Tanto yo como su hija y otras personas que también están implicadas. Todo lo que dice Maite Galdeano es totalmente falso".