Chenoa está viviendo un caótico 2020. La cantante y el urólogo, Miguel Sánchez Encinas, han visto truncados su planes de convertirse en marido y mujer. La pareja, entusiasmada con la idea de formar una familia, no les ha quedado más remedio que posponer su boda para cuando la situación actual de crisis sanitaria se lo permita.
Al igual que otras celebrities, la artista y el médico han cogido con ansias las vacaciones. Aprovechando el buen tiempo, los tortolitos han inaugurado su verano en Mallorca junto a la hija de él. Ataviados con sus mascarillas y cogidos (los tres) de las manos, así se les ha visto paseando por la localidad de Valldemossa, una ubicación ideal para olvidar el chasco del enlace que debería haberse celebrado el pasado 14 de junio.
Ya que se han quedado sin luna de miel, Chenoa ha aprovechado para enseñar cada rincón de su tierra a Miguel y, a juzgar por la sonrisa que se aprecia debajo de su mascarilla, ¡mejor no lo pueden estar pasando! Además, se lleva a las mil maravilla con la hija de su novio y la conexión entre ambas es asombrosa.
La exconcursante de la primera edición de 'Operación Triunfo' ha mostrado durante los últimos meses la preocupación que sentía sobre la situación que estaba atravesando su pareja, ya que al ser médico formaba (y forma) parte del grupo de alto riesgo: "He estado pendiente de que él esté bien, de cuidarle. Se ha dejado la piel como todo el equipo sanitario y todos los que trabajan en el sector. No han descansado nada".
La intérprete de 'Cuando tú vas' está enamoradísima y las ganas de casarse con él no las frena ni el virus: "Estando con Miguel durante el confinamiento me he dado cuenta de que sí quiero casarme con él, más que nunca vamos".