La desesperación vuelve a las vidas de Albano y Romina Power. El cuerpo hallado en Florida, y para el que se solicitó una muestra de ADN de los artistas, no es el de Ylenia Carrisi, las pruebas han dado negativo.
Esta era una de las últimas esperanzas que los dos italianos albergaban de encontrar, por fin, a su querida Ylenia. La joven desapareció hace veinte años, mientras se encontraba de viaje por Estados Unidos. Concretamente, perdieron su pista en Nueva Orleans, y el hallazgo de este cadáver en Florida podría haber puesto punto y final a una pesadilla que ya dura demasiado tiempo.
Pues bien, ante los restos encontrados, y tras la declaración del asesino, Keith Hunter Jesperson, de que esa podría ser la joven, que entonces se hacía llamar Susanne, el forense Dennis Haley pidió unas muestras genéticas a los dos padres, que, evidentemente, las dieron sin poner objeción alguna. Ahora, y tras dos semanas de incertidumbre en las que se han cotejado las muestras y se han llevado numerosas pruebas, estas han dado negativo. Un palo más para esta familia que se rompió hace dos décadas y que parece que jamás podrán cerrar este capítulo de sus vidas, pues siempre regresa para volver a herirlos en lo más profundo de su corazón. Por eso era tan importante que las pruebas salieran positivas, para, de una vez por todas, poder dar sepultura a su hija y saber exactamente, por muy dura que sea la verdad, qué pasó con ella en 1994.
Albano tiene todas las esperanzas perdidas en volver a ver a su hija, en cambio, la madre y la tía, siempre han creído que Ylenia no está muerta, sino que se encuentra en algún otro lugar empleando otro nombre, pero cada vez están más abatidas y poco a poco pierden la fe en recuperar a Carrisi, que ahora tendría algo más de cuarenta años.