No faltaba de nada. La moqueta contenía la doble C, en los tapetes verdes se leía con claridad la firma que organizaba el desfile más esperado de todos y las máquinas estaban a punto de entregar su premio gordo. Chanel no ha defraudado con su show de alta costura otoño/invierno 2015 y ha jugado con una carta infalible: poner a VIPS interactuando con modelos y el entorno.
Hasta ahora hemos ido al súper de Chanel, Karl nos ha hecho viajar en el avión de la firma, el diseñado ha encabezado la revolución feminista más a la moda y esto solo por nombrar algunos de los últimos desfiles de la casa, los más esperados de cada semana de la moda de París.
Su show en esta ocasión, además de contar con sus maniquíes de cabecera preferidas, como Kendall Jenner, ha puesto sobre la pasarela, en este caso, casino, a un buen puñado de famosas que son auténticos iconos de la firma. Desde los más veteranos como Vanessa Paradis, a los recién llegados, como su hija Lily Rose. Todas han apostado, han hecho juego en las mesas y, al final, la única banca que ha ganado ha sido la de Karl, que ha vuelto a dejarnos a todos boquiabiertos. Tremenda mano la que llevaba el alemán.