Lo que parecía imposible sucedió el pasado fin de semana. Después de muchos años sin aparecer en actos juntos, el rey Felipe VI (56 años) y la infanta Cristina se dejaban ver, juntos, en la boda de Victoria López-Quesada, ahijada del monarca, y Enrique Moreno. Los hijos de la reina Sofía llegaban en el mismo coche, que conducía el marido de Letizia, al enlace, donde fueron fotografiados por los periodistas allí reunidos. Una imagen cotidiana y casual, pero muy esperada y que oculta toda una intrahistoria de tensiones y enfados.
Pero, ¿en qué momento estalló todo por los aires?¿Cuándo la relación de los reyes y las infantas tomó un rumbo de no retorno? ¿Cuál es el verdadero origen de este distanciamiento? Pues, ni más ni menos, que un desplante producido durante un momento de mucho dolor para la familia Borbón, concretamente para los Gómez-Acebo.
Era Pilar Eyre, en su blog de Lecturas, la que desgranó, punto por punto, el momento en que todo terminó (o eso parecía). Para entenderlo, hay que ser conscientes de la relación que unía a Felipe, Letizia, Cristina y Elena con los Gómez-Acebo. Hubo un tiempo en que los hijos de Pilar de Borbón y los del rey emérito Juan Carlos eran uña y carne. Un vínculo que el tiempo se encargó en transformar, especialmente en el caso de Felipe.
¿La razón? La 'mala' relación entre Letizia y la familia de su marido. Malos gestos y cada vez más distancia pasó factura al entendimiento entre primos. Algo que extrañó mucho que que el fallecido Fernando Gómez-Acebo fue una de las personas que más ayudó a la madre de la princesa Leonor a integrarse en la familia en su momento.
El desplante de Felipe y Letizia con Cristina y Elena que lo dinamitó todo.
Fue en este contexto relacional cuando tuvo lugar el momento clave que cambió el vínculo de los reyes y las infantas para siempre. Cuando ese enfriamiento entre primos ya se había consolidado tuvo lugar un tráfico evento que acabó de reflejarlo por completo: el funeral de la infanta Pilar. Los reyes Felipe y Letizia acudieron hace algo más de cuatro años a la despedida a la hermana del rey Juan Carlos, a su vez tía de don Felipe.
Pero más allá de por ver marcado este momento por la relación de doña Letizia con los Gómez-Acebo, si algo se le ha venido a la mente a Pilar ha sido el gesto que los monarcas tuvieron allí con las infantas Elena y Cristina. "En el funeral de doña Pilar, hace cuatro años, fue cuando Letizia y Felipe se negaron a saludar a Cristina y Elena y les dieron ostentosamente la espalda ante el desconcierto de las dos infantas, que no sabían dónde mirar", relataba Eyre.
Una situación que, pasado el momento, habría enfadado a las hermanas del rey, que no les habría hecho ni pizca de gracia ese momento de incomodidad en un evento tan delicado. Sus caras en las imágenes de aquel día lo dicen, prácticamente, todo: miradas serias y disimuladas que denotaban la incredulidad que recorría a las infantas.
Además, no fue lo único por lo que la misa por la infanta Pilar fue comentada. Más allá de por la triste pérdida o por el dolor de sus hijos, hubo otros gesto de la reina Letizia que eclipsaron todo lo demás. Uno de ellos es la mirada, de reojo, que la reina dirigió a sus cuñadas al acceder a la iglesia.
El otro, tal y como recuerda Pilar Eyre, "fue el hecho de que la reina no se persignara ni siguiera los ritos ceremoniales de la iglesia católica". Unos gestos que son habituales en doña Letizia en este tipo de actos pero que cobraron más protagonismo al llevarlos a cabo ante toda la familia de su marido. Una prueba más de que aquel día la tensión estaba en el aire y acabó provocando uno de los distanciamientos más comentados.
La línea roja que el rey Felipe ha marcado con su hermana Cristina tras reconciliarse
Aunque la imagen del rey Felipe con su hermana Cristina señala la reconciliación entre ambos, algo muy vinculado con el divorcio de la infanta con Iñaki Urdangarin, ha habido algunos límites que el monarca no está dispuesto a saltarse. La más evidente es que el marido de Letizia no está dispuesto a devolverle a la infanta el título de Alteza Real o el ducado, como tampoco va a permitir que su hermana mayor representé a la Corona en un acto institucional de nuevo.
Cabe recordar que Felipe despojó a la madre de Irene Urdangarin de varios privilegios en 2015 tras estar implicada en el Caso Noòs. Concretamente, el rey le quitó la asignación económica y los mencionados títulos. El motivo para hacerlo es que el escándalo que en aquel momento rodeaba a su hermana, no salpicar a la nueva imagen que él y Letizia estaban intentando transmitir. Razón por la que siempre han querido separar la imagen pública de Leonor y Sofía del resto de miembros de la familia.