Desde hace meses la casa real noruega pasa por una de las etapas más complicadas. No solo la salud de Mette-Marit (51 años) preocupa a la corona, también el caso de su hijo Marius Borj (38 años). El joven, que no pertenece a la familia real del país, se vio en vuelto en una grave polémica: fue acusado por su expareja en el verano de 2024 de haberla maltratado tanto física como emocionalmente en su piso de Oslo.
Pero tras salir a la luz la primera denuncias, dos de sus exnovias revelaron que habían pasado por el mismo calvario. Desde entonces el hijo de la princesa ha tenido tres órdenes de alejamiento, ha estado varios días en prisión preventiva y ha ingresado en un centro en el extranjero para comenzar un tratamiento por sus adicciones. De hecho, la familia real ha intentado desvincularse para que no se manchara su imagen, pero la prensa descubrió que Mette-Marit estaba involucrada ayudando a su hijo.
"Entiendo que hay muchas preguntas sobre esto. Por supuesto, como comprenderás, es una situación complicada", expresó Hakoon, heredero al trono. Y es que después de semanas llenas de titulares, también se descubrió que la madre de Marius le ayudó a eliminar algunas pruebas. Pero no solo eso, también que Mette-Marit habría estado en contacto con la policía durante el proceso y que además ella fue avisada para que llamara a su hijo en el momento del arresto.
Ahora, varios meses después y en medio de toda la polémica, la prensa noruega ha revelado la última hora sobre Marius Borg. Y es que la policía ha vuelto a poner contra las cuerdas al hijo de Mette-Marit. El pasado 2 de marzo expiró una de las órdenes de alejamiento que el joven tenía puesta por una de sus exnovias. Pero este miércoles 12 se ha conocido la sentencia del Tribunal de Distrito de Oslo, que mantiene la orden de restricción hasta el próximo 2 de junio.
La policía solicitó que la orden de alejamiento se extendiera tres meses más, pero el hijo de la princesa lo impugnó a través de su abogado. "Esto no tiene ninguna importancia práctica para él, pero habría sido bueno librarse del estigma", ha dico la abogada de Marius, Ellen Holager Andenæs, a 'VG'. "Ha sido tal como se esperaba. Absolutamente correcto que así sucediera", ha dicho Mette Yvonne Larsen, asesora legal de la exnuera de Mette-Marit, dejando claro que era una petición tanto de la policía como de su cliente.
El tribunal justifica, entre otras cosas, la continuación de la orden de alejamiento diciendo que el hijastro de Hakoon es sospechoso de haber violado la orden por cuarta vez a raíz de un mensaje que supuestamente envió a su ex en diciembre. Eso sí, después de esto no ha habido ningún contacto entre ellos, según cuenta el citado medio.
Sin embargo, la abogada defensora ha manifestado que no ha violado la orden de alejamiento, pero el tribunal no cree que la documentación a la que se ha referido cambie de manera decisiva los motivos de sospecha. Høiby había admitido previamente haber agredido a la mujer tras un incidente ocurrido en Frogner la noche del 4 de agosto del año pasado.
Sin embargo, la abogada defensora ha manifestado que no se ha violado la orden de alejamiento en ningún momento, pero el tribunal no cree que la documentación a la que se ha referido cambie de manera decisiva los motivos de la sospecha. Además, Marius había admitido previamente haber agredido a la mujer tras un incidente ocurrido en Frogner la noche del 4 de agosto del año pasado.
"El fin de semana pasado ocurrió algo que nunca debió pasar. Cometí una agresión física y destruí objetos en un apartamento bajo los efectos del alcohol y la cocaína después de una discusión", dijo el hijastro del heredero al trono en una declaración a la prensa después de lo ocurro. De hecho, el joven ya se había declarado culpable de acuerdo con la declaración, pero no había reconocido los otros cargos que había contra él.
Lo cierto es que Marius parece encontrarse en una complicada situación sin salida, aunque parece que ser el hijo de Mette-Marit le está ayudando bastante a no ir a la cárcel. Y es que entre los quebrantamientos de la ley que se le acusan o que se están investigando está un delito sexual a una mujer de 20 años el pasado 27 de noviembre, el de violación sin relación sexual con otra que no pudo resistirse al acto en septiembre de 2024, el de haber agredido sexualmente a otra chica mientras dormía (después de haber tenido sexo), el de haber ejercido violencia doméstica a una de sus exparejas, el caso de Juliane Snekkestad, el caso de Nora Haukland, también por amenazar a un hombre a través de redes sociales y además de haber abusado de Linni Meister.