Desde que saltara por los aires el romance entre Iñaki Urdangarin y Ainhoa Armentia gracias a las imágenes publicadas en exclusiva por Lecturas y dinamitara por completo su matrimonio de 24 años con la infanta Cristina, todas las miradas estaban puestas en los puntos clave que efectuarían su divorcio.
Han pasado varios meses desde que todo saltara por los aires y mientras Iñaki Urdangarin afianza su relación con Ainhoa, doña Cristina se ha volcado en el cariño de su familia. Tal y como ha publicado Semana, la expareja ya habría firmado la disolución de las capitulaciones, un paso más ante su separación definitiva.
En dicho acuerdo, la infanta Cristina se queda con la custodia de sus cuatro hijos pero Iñaki no tendrá ningún problema en verlos siempre que quiera. Cabe recordar que Irene es la única de sus hijos que es menor de edad por lo que esa "libertad" será mucho mayor para el ex duque de Palma.
Con respecto a la parte económica, la publicación anteriormente citada asegura que Urdangarin no tendrá que pasar ningún tipo de pensión alimenticia por ninguno de sus hijos y tampoco recibirá ningún dinero por parte de su exmujer, algo que se comentó firmemente teniendo en cuenta que desde que Iñaki entrara en prisión en 2018, la infanta se había hecho cargo del núcleo familiar.
Después de todo lo sucedido, los planes de vida de la hermana de Felipe VI habrían cambiado. Se espera que doña Cristina vuelva a España de cara al año que viene cuando su hija Irene termine sus estudios de Bachillerato en Ginebra. Mientras tanto residirá en la ciudad suiza. Por su parte, Iñaki está decidido a vivir su amor por Ainhoa Armentia con total libertad mientras retoma su vida profesional enfocada al deporte, su gran pasión.