Teodora de Grecia sorprendió con un segundo vestido en su boda con Matthew Kumar: bordado a mano y con bonitas flores artesanales

La gran boda griega de Teodora de Grecia culminó con un cambio de vestido y una bonita celebración en la que hubo multitud de detalles que destacaron mucho entre los asistentes

Pablo Sánchez
Pablo Sánchez

Periodista especializado en corazón y actualidad

Teodora de Grecia y Matthew Kumar
Gtres

Ayer vivimos el gran día de Teodora de Grecia y Matthew Kumar, un evento muy importante para la pareja que, tras varios intentos, por fin conseguía darse el esperado ‘sí, quiero’ en la Catedral Metropolitana de Atenas, mismo lugar en el que se casaron en el año 1962 el rey don Juan Carlos y la reina Sofía. De hecho, la emérita acudió a esta boda junto a sus hijas, las infantas Elena y Cristina, que deslumbraron con sus elegantes looks, así como lo hizo Irene Urdangarin, una de las invitadas más estilosas. Pero si hubo alguien que destacó nada más llegar a este templo fue la propia Teodora, cuyo vestido de novia nos pareció muy elegante y romántico, uno que dejó a un lado más tarde para sorprender a todos los invitados con un segundo vestido.  

Teodora de Grecia sorprende con un segundo vestido de novia

Tras el enlace, que comenzaba a las seis de la tarde y terminaba sobre las siete, pudimos ver como Ana María de Grecia protagonizaba un bonito momento cuando acudía al rescate de su hija a la puerta de la iglesia, colocando el llamativo escote de la novia para que esta luciese espectacular en todas las imágenes del enlace. Un bonito gesto que nos dejó ver la excelente relación existente entre madre e hija.

Tras la ceremonia, todos los invitados, incluido el recién estrenado matrimonio, acudieron al lujoso One&Only Aesthesis Hotel, en Glyfada Beach, donde se llevó a cabo la celebración de la recepción y pudimos presenciar unos cuantos y bonitos momentos. Lo mejor, y de lo más destacado, tal y como informan desde ‘Vanitatis’, es que Teodora eligió cambiarse de vestido para la ocasión, presentándose en la recepción con un nuevo vestido, también diseñado por la griega Celia Kritharioti. Este otro diseño también tenía los hombros al aire y estaba bordado a mano con cristales de Swarovski, además de estar adornado con bonitas flores artesanales, tal y como informan en el citado medio.

El bonito momento cortando la tarta de los novios

En esta recepción fue donde pudimos ver el nuevo traje nupcial de Teodora, que lució mientras cortaba la tarta de bodas con Matthew, protagonizando un divertido y emotivo momento. Mientras sonaba la canción 'This will be (an everlasting love)' de Natalie Cole, el recién estrenado matrimonio cortaba la tarta nupcial, primera actividad conjunta siendo ya una pareja formal. Sin duda, un divertido momento con esta mítica canción como telón de fondo, una tan animada que hasta el novio se lanzó a bailar de manera espontánea delante de todos los presentes, dejándonos ver el lado más natural y carismático de Kumar, que se dejó llevar por el momento y disfrutó al máximo de su gran día.

Teodora de Grecia y Matthew Kumar
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El homenaje al rey Constantino

El padre de la novia, el rey Constantino, fallecía hace menos de dos años, un duro bache que hizo a la joven posponer la boda por tercera vez. Teodora iba a acudir acompañada de su padre al altar, papel que finalmente adoptó su hermano, Pablo de Grecia, que hizo las veces de padrino.

Ana María de Grecia
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Aun así, Ana María quiso rendir un discreto homenaje a su marido llevando una preciosa cruz de diamantes de gran tamaño que ella misma había lucido anteriormente en el día de su boda. Esta vez la llevaba incrustada en un collar de perlas blancas de tamaño XXL. Sin duda, una bonita manera de tenerle presente en uno de los días más destacados y bonitos para toda la familia.

Las flores de la boda, para todos los griegos

Tal y como hemos podido comprobar en diferentes publicaciones en redes sociales como Instagram, las flores blancas que adornaban la entrada y las escaleras hasta la puerta de la Catedral no sólo sirvieron como un bonito accesorio, también se convirtieron en un recuerdo físico que pudieron recoger los múltiples asistentes que no quisieron perderse la boda del año para los habitantes de Grecia.

De hecho, al terminar la ceremonia, se dejó a los presentes acercarse y coger algunas de las rosas blancas que habían formado parte de esta decoración, teniendo así un recuerdo muy personal y emotivo de este día tan señalado. Tal y como podemos ver en algunas imágenes que han salido en redes, fueron bastantes los curiosos que decidieron acercarse y llevarse a casa una parte de esta cita nupcial royal.