La enfermedad de Carlos III ha pillado a contrapié a toda la sociedad británica, y en especial a la familia real, que ha tenido que hacer serios reajustes en sus respectivas agendas. Que hasta el príncipe Harry haya volado de manera urgente desde Estados Unidos para reunirse con su padre demuestra que la situación es seria, aunque quizá no tanto como para haberse traído a toda la familia o tal vez para quedarse unos días al lado de su padre mientras este lucha contra el cáncer que le ha sido diagnosticado. Lo cierto es que Harry ha estado poco menos que 24 horas en Reino Unido y ni siquiera se ha reunido con su hermano Guillermo, que bastantes preocupaciones tiene con la enfermedad de su padre y la convalecencia de su mujer, Kate Middleton.
La princesa Ana ha multiplicado los actos a los que tiene que asistir.
Una mujer muy bien valorada por la sociedad británica
Quien sí ha dado un paso adelante para arrimar el hombro ha sido la princesa Ana, hermana de Carlos de Inglaterra y única hija de la reina Isabel II. Ana es una mujer muy bien valorada por la sociedad británica y está considerada como la más trabajadora de la familia.
Tanto es así que, tras la baja del rey Carlos, la princesa Ana ha visto multiplicar su agenda de actos oficiales. Solo el pasado martes tuvo cuatro compromisos que atender y también ayer tuvo el día muy completo. Con un abrigo rojo, la vimos en el área de entrenamiento durante su visita al Regimiento de Entrenamiento de Eliminación de Artefactos Explosivos de Defensa en St George's Barracks, en la localidad de Bicester, Inglaterra. Ana es coronel en jefe del Real Cuerpo Logístico.
La hermana de Carlos III durante la visita a un área de entrenamiento de eliminación de artefactos explosivos.
Esta semana también pudimos ver a la princesa en otra visita, esta vez en Nottingham, a un centro de atención primaria. Lo que chocó ese día fue su indumentaria, ya que recicló un chaquetón de color morado que había pertenecido a su madre, dando así una muestra de estar alejada del derroche en ropa que está presente en otras casas reales europeas. Un guiño, sin duda, al nuevo reinado de Carlos III, que apuesta por la sostenibilidad, la cercanía y la modernidad.
La reina Isabel en 2010, con el chaquetón morado que vistió hace unos días la princesa Ana.
Sustituta de Carlos en su ausencia
Ana y Carlos siempre han estado muy unidos, ya que se llevan muy pocos años de edad. Muy distinta es la relación de ambos con sus hermanos pequeños, Andrés y Eduardo, quienes por cuestiones de edad siempre han tenido intereses diferentes. Y si desde niños Ana y Carlos han compartido educación, tiempo libre y muchas confidencias, en cuanto Carlos ascendió al trono tras el fallecimiento de la reina Isabel, el nuevo monarca no dudó en darle su sitio a su hermana nombrándola su sustituya en su ausencia.
Igualmente, Carlos le concedió a su hermana el privilegio de ocupar la función honorífica 'Palo de Oro' durante y después de la ceremonia de coronación, una distinción que data del siglo XV, como premio a su lealtad y devoción por la corona. Esta función significó que Ana fue a caballo justo detrás del carruaje que llevaba a los nuevos reyes a la Abadía de Westmister para ser coronados, y tras ella, desfilaría un ejército de 6.000 soldados. Y lo mismo al regreso al palacio de Buckingham.