Ha sido una ceremonia marcada por un férreo protocolo del que no se han separado ni un segundo. La monarquía británica se vestía de gala para la esperada Coronación de Carlos III. Con la emoción a flor de piel, el hijo de la desaparecida reina Isabel II cumplía con todas las obligaciones marcadas para oficializar el título que ostenta desde el fallecimiento de su madre. Las miradas del mundo entero han estado posadas en Londres para analizar cada uno de los gestos y detalles que han ocurrido. Y no han sido pocos a lo largo de las más de dos horas de duración.
El príncipe Guillermo después de jurar su cargo como príncipe de Gales
La emoción del príncipe Guillermo con su padre
Uno de los momentos clave de la ceremonia ha sido, como no, el juramento del príncipe Guillermo como príncipe de Gales. El hijo mayor del rey Carlos seguía el ejemplo de su padre en su momento y se convertía, ya de forma oficial, en la segunda figura de la Casa Real británica. Emocionado, casi no podía contener las lágrimas durante los instantes en los que ha sido protagonista. Tras su juramento, se acercaba a su padre, tocaba la corona y le daba un beso en la mejilla. Carlos respondía con un 'gracias, William'.
Es, sin duda, un instante que quedará para la historia, tanto de los Windsor como del pueblo británico. La popularidad de Guillermo y Kate Middleton no ha hecho más que crecer en los últimos tiempos. Y eso que no ha sido sencillo con todas las polémicas relacionadas con el príncipe Harry y Meghan Markle. Guillermo se ha mantenido firme al lado de su padre en todo momento, tratando de salvaguardar la solidez de la corona.
El príncipe Harry, muy pendiente de algo que ocurría en la catedral
El desconcierto del príncipe Harry
El príncipe Harry regresaba a Londres en solitario para asistir a la coronación de su padre. No así Meghan Markle, que optaba por permanecer en Estados Unidos para celebrar el cumpleaños de su hijo. El duque de Sussex acudía a la catedral donde iba a tener lugar la ceremonia acompañado de sus primos. Una soledad más que evidente en el peor momento de su relación con los Windsor. Su documental, su libro y todas las entrevistas que ha dado en estos meses han pasado factura.
Harry tomaba su asiento en la catedral de Westminster en una posición más propia de invitados que de familiares. El hijo menor de Lady Di protagonizaba uno de los momentos más comentados de la ceremonia al gestualizar de forma exagerada durante los momentos previos a la llegada del rey Carlos III. ¿Qué le pasaba al duque de Sussex? No han trascendido más detalles al respecto pero Harry no ha podido evitarlo.
Los inconvenientes de la reina Camilla con la pesada corona
Los inconvenientes de Camilla con el peso de la corona
¿Quién podía imaginar, hace unos años, que Camilla Parker Bowles acabaría siendo reina de Inglaterra? La esposa de Carlos III también se convertía este sábado 6 de mayo en reina de forma oficial y vivía un momento de enorme emoción y algo de incomodidad. El peso de la corona hacía que la reina pasase un instante de pánico que podría haber acabado de la peor forma. Con la mano, se sostenía la corona para que esta no terminase en el suelo. Menos mal que, finalmente, no ha ido a mayores.
Camilla aparecía con un espectacular diseño en blanco que entusiasmaba a todos. Los estilismos elegidos por las protagonistas de la Casa Real británica han sido de lo más acertados. Kate Middleton sorprendía al vestirse de novia, apostando también al blanco, con unas joyas espectaculares y guiños tanto a Diana de Gales como a la desaparecida reina Isabel II. Toda una declaración de intenciones por parte de Kate y Camilla que se nutre de los recuerdos más queridos por el pueblo británico.
El pequeño Louis no ha podido aguantar la misa sin terminar bostezando
Los bostezos del príncipe Louis
Si un gesto ha despertado toda la simpatía, y también la empatía, ha sido el del príncipe Louis. El hijo menor del príncipe Guillermo y Kate Middleton bostezaba durante la larga ceremonia de dos horas de Coronación del rey Carlos sin tapujos ni vergüenzas. El pequeño, ya cansado de la misa que estaba teniendo lugar, trataba de entretenerse con su hermana, comentado las cosas que ocurrían en la catedral. Pero, claro, ¿quién aguanta esas dos horas sin inmutarse?
Es un clásico de cada acto de las Familiares Reales el momento en el que los más pequeños se muestras claros y naturales ante las cámaras. En la memoria de todos, las muchas travesuras de Froilán que hemos podido ver en distintas ocasiones. Al lado del hijo mayor de la infanta Elena, la corrección de los hijos de los príncipes de Gales es casi modélica.