A principios del pasado mes de diciembre Guillermo y Stéphanie de Luxemburgo anunciaban que estaban esperando su primer hijo. Será en primavera cuando pareja, heredera del Gran Ducado, vea la carita de su próximo bebé, una descendencia que llega como agua de mayo para la familia.
La pareja, que contrajo matrimonio hace siete años y desde entonces, con el país en vilo, excusaron su negativa a tener hijos por el momento con la idea de querer disfrutar de un tiempo para ellos antes de embarcarse en la gran aventura que supone formar una familia. La feliz noticia se convertía así en una alegría, no solo para sus familiares, sino para todos los ciudadanos luxemburgueses.
Mes y medio después de anunciar la buena nueva, parece que el embarazo le está sentando de maravilla a Stéphanie de Lannoy. La esposa del príncipe Guillermo aparecía en su primer acto público tras conocerse la noticia en la tradicional recepción de Año Nuevo que se ha celebrado en Palacio. Una cita a la que la Gran Duquesa se ha tenido que ausentar ya que su hermano Luis Mestre se encuentra ingresado y en estado de gravedad, por lo que se ha visto obligada a cancelas los compromisos de su agenda durante los próximos días.
A la ceremonia han acudido además el Gran Duque Enrique, la princesa Alexandra y los herederos. Stéphanie ha podido presumir de embarazo con un precioso vestido en el color pantone del año, classic blue. La princesa ha escogido un diseño de seda y encaje de la firma premamá Seraphine, una de las preferidas de Kate Middleton, cuyo precio es de 269 euros. Lo ha combinado con un impresionante collar de chatones y una tiara de diamantes y zafiros con los que ha deslumbrado en la velada.