La princesa Leonor estrenó ayer su agenda oficial de 2020. Lo hizo en el Congreso de los Diputados, donde junto a sus padres don Felipe y doña Letizia y su hermana la infanta Sofía asistió a la apertura de la XIV legislatura. Para la ocasión la heredera al trono escogió un atuendo con el que ya le habíamos visto en otra ocasión. Pero aunque en el estilismo Leonor no innovó, sí que hubo un detalle muy especial que aunque casi pasa desapercibido, es muy importante.
El sillón en el que se sentó la princesa de Asturias llevaba grabado algo muy significativo. Normalmente los asientos en los que se sientan los miembros de la familia real en este tipo de actos tienen detalles de lo más personalizados. Y en el caso del asiento en el que se sentó ayer la hija mayor de los Reyes, estaba grabado su escudo de armas. Algo que ya habíamos visto en la entrega de los premios princesa de Asturias celebrados en octubre pero que nunca había estado presente hasta ahora en el Congreso de los Diputados. Este escudo es muy similar al de su padre Felipe VI, pero cuenta con algunos detalles que lo hacen único. Entre otros lleva grabado su propio guion y estandarte, además del castillo de oro por el reino de Castilla, un león por el reino de León, cuatro pases por el de Aragón y una cadena de oro por el de Navarra.
Esta es una forma de darle más protagonismo y relevancia a Leonor. Incluyendo símbolos que destacan su papel como princesa y heredera y que diferencian su rango con el que de su hermana, se le va dando más importancia a su papel institucional. La infanta Sofía no tiene escudo de armas, por eso en su asiento se podía ver grabado el escudo de España.