Son tiempos difíciles para la Casa Real, tiempos en los que el rey Juan Carlos está más que nunca en el punto de mira por protagonizar diferentes polémicas de las que la reina Sofía se ha mantenido al margen. Ella continúa con su vida, y las vacaciones de verano no iban a ser menos. La madre del rey Felipe aterrizaba hace unas horas en Mallorca para seguir un año más con la tradición familiar de pasar unos días de verano en la isla balear. Lo hacía acompañada de su hermana, la princesa Irene -otra habitual en el lugar-, y de su hija, la infanta Elena. Las tres ya han aprovechado para dar los primeros paseos por Palma. Parece que la royal ha encontrado en ellas su mejor apoyo en estos tiempos complicados para la reputación de su marido.