Mientras que el rey Felipe VI continúa con su cuarentena preventiva por haber estado en contacto con un positivo en coronavirus, los distintos miembros de la familia real continúan con sus agendas de manera exhaustiva. Una semana que la reina Sofía ha aprovechado para ganar protagonismo.
Tras unos meses en los que la reina Sofía pasó más desapercibida debido a los escándalos del rey Juan Carlos, doña Sofía ha vuelto con fuerza a la agenda de la Casa Real. La madre de Felipe VI ha estado presente en numerosos actos solidarios, como sus visitas a diversos bancos de alimentos de toda España, y en reuniones de trabajo, como la que ha presidido este martes 1 de diciembre.
En concreto, doña Sofía ha presidido la reunión ordinaria del Patronato de la Fundación Reina Sofía. La Emérita tiene un gran cariño por la asociación, en la que sigue trabajando activamente y en la que se ha implicado muchísimo desde su creación, en 1997, cuando incluso aportó el capital que ayudó a fundarla.
La reina Sofía presidiendo una reunión de la fundación que lleva su nombre
Así, este martes la Fundación se ha reunido para aprobar el plan de actuación de la organización para 2021 que, además de recoger diversos fines solidarios, irá enfocado en paliar la situación de emergencia que ha causado la pandemia del coronavirus.
Una ocasión para el que la reina Sofía ha optado por lucir uno de los colgantes más especiales de su joyero. Se trata de una cadena dorada en la que cuelgan medallas con las iniciales de sus nietos e hijos. En concreto, en ellas se pueden leer la E, de Elena; la C, de Cristina; la J, de Juan; la I, de Irene; la L, de Leonor; y la S, de Sofía. Un diseño discreto pero con un significado muy importante para la monarca, quien vuelve a demostrar una vez más que su mayor debilidad es su familia.