La reina Letizia ha reaparecido este viernes en Madrid como última aparición pública de la semana para presidir el acto de entrega de la Enseña Nacional, en su modalidad de Estandarte, a la Academia de Aviación del Ejército de Tierra. La ocasión lo merecía y la mujer de Felipe VI no suele defraudar en cuanto a estilismos de altura se merece pero esta última elección merece mención aparte...
Nos tenemos que remontar 16 años atrás para recordar el día en que la por entonces Princesa de Asturias estrenó este primaveral abrigo de tweed en color crema. Nada más y nada menos que al bautizo de su hija Leonor celebrado el 14 de enero de 2006 en el Palacio de la Zarzuela.
Se trata de un diseño que como es evidente no pasa de moda. Un abrigo-vestido de largo midi, escote cruzado y abotonadura delantera confeccionado en exclusiva por Felipe Varela que se ajusta a la perfección a su silueta.
Los complementos que acompañaban a esta joya estilística que ha descansado más de 16 años sin ver la luz realzaban más si cabe la sublime elección de la consorte. Salones cruzados en color camel a juego con un bolso de asa corta en blanco y camel. Se trata concretamente del modelo Camelot de Carolina Herrera, que forma parte de su amplia colección desde 2015.
El look beauty de la Reina coronaba un estilismo sin ningún pero. Doña Letizia recogía su melena en un moño bajo con raya al lado de lo más favorecedor que dejaba al descubierto unos sencillos pendientes y su inseparable anillo de Karen Hallam. La consorte nos ha vuelto a dar una lección de estilo. Si se trata de dar una nueva vida a las prendas del pasado... Letizia también es Reina.