El futuro inmediato de la familia real era una incógnita después de que la princesa Leonor tuviera que ser confinada tras un positivo en coronavirus en su clase. Además de la princesa de Asturias, don Felipe, doña Letizia y la infanta Sofía fueron sometidos a un test PCR que dio resultado negativo en todos los casos.
Aunque Leonor tendrá que seguir en cuarentena por prevención al haber estado en contacto directo con un positivo, el resto de la familia puede seguir con su vida con total normalidad. Y así ha sido. Este lunes, la Reina ha dado comienzo a su agenda semanal con un viaje a Navarra.
Doña Letizia reaparecía a primera hora de esta mañana en el norte de nuestro país para presidir el acto de apertura del Curso 2020/2021 en dos centros escolares. Unos actos en los que, como era de esperar, la Reina ha tenido que hacer frente a las preguntas sobre su hija. La mujer de Felipe VI ha aclarado que Leonor se encuentra bien. La heredera al trono está cumpliendo con sus obligaciones educativas de manera telemática hasta que pueda volver al centro.
La monarca, además, ha reaparecido con un cambio sustancial en su estilismo y no, nada tiene que ver con el look descafeinado con el que se ha presentado hoy. Desde el inicio de la pandemia, hemos visto a todos los miembros de la familia real luciendo mascarillas quirúrgicas, sin embargo, para sorpresa de todos este lunes la Reina ha optado por el modelo FFP2, que ofrece una mayor protección contra el virus ya que, además de impedir el contagio a otros, también protege al que la lleva del virus.
El cambio de mascarilla parece que nada tiene que ver con el confinamiento de la princesa Leonor sino con el acto en sí ya que doña Letizia ha estado rodeada en todo momento de alumnos. Pero la cosa no se quedaba ahí y minutos más tarde, ya en su segunda parada en el instituto EGA, la mujer de Felipe VI aparecía sorprendentemente con una mascarilla quirúrjica. Un vaivén de mascarillas sin explicación aparente.