La reina Letizia habla por primera vez de la dolorosa afección que sufre en los pies

Los tradicionales 'corrillos' tras el desfile militar del Día de la Hispanidad han dado para mucho. Tanto, que doña Letizia no ha tenido reparos en hablar de la dolorosa afección que padece

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Rebeca Alonso

Redactora digital de Lecturas

Letizia y Felipe
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Hace apenas un mes, con motivo del 50 cumpleaños de la reina Letizia', El País Semanal hacía un extenso reportaje sobre la consorte en el que revelaba detalles hasta ahora desconocidos. Lejos de lo que se podía pensar, la mujer de Felipe VI "aborrece" los zapatos de tacón, pero es consciente que en muchos casos forma parte de su uniforme de trabajo. El uso continuado de este tipo de calzado le provocó metatarsalgia, una dolencia que ha ido a más, tal y como ha contado ella misma durante la recepción de la Fiesta Nacional, celebrada este miércoles en el Palacio Real.

Después de dar la bienvenida a los 2.500 invitados entre los que se encontraban diferentes personalidades del mundo de la política, empresa, cultura y sociedad de nuestro país, todos disfrutaron de un cóctel donde los Reyes tuvieron la oportunidad de disfrutar de un encuentro más ameno e informal con todos los presentes. Los presentes han querido resaltar la cercanía de los monarcas que se movían de un lado a otro compartiendo confidencias con los miles de asistentes.

Fue en uno de esos "corrillos" cuando doña Letizia le confesó a algunos periodistas que el pasado mes de junio le diagnosticaron Neuroma de Morton. Se trata una dolorosa afección que afecta al metatarso, generalmente a la zona entre el tercer y cuarto dedo del pie. Afecta mucho más a las mujeres por el uso frecuente de zapatos de tacón.

Letizia

La reina Letizia a su llegada al Salón del Trono

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Aunque no ha reducido el uso de salones a pesar de esta incómoda dolencia, doña Letizia ha transformado sus stilettos para lograr una mayor comodidad. Tal y como se puede ver en la imagen, el modelo de Magrit en color blanco que escogió ayer posee una pequeña plataforma que le aporta confort y bienestar. Un ligero cambio que ha trasladado a su calzador.

Al parecer no es un diagnóstico sencillo porque no presenta ninguna señal visible. Simplemente, la persona que lo padece siente un dolor constante como si de una piedra en el zapato se tratara y que se acentúa cuando se está de pie mucho tiempo.

En primera estancia se trata con una plantilla personalizada, sesiones de fisioterapia y los médicos suelen recomendar el uso de calzado plano y ancho (algo que doña Letizia no está por la labor). En última instancia se recurriría a una cirugía.