Ellas se someten a medios de comunicación prácticamente durante toda su vida. Fotografías, reportajes, entrevistas, robados y un sinfín de momentos en los que son el objetivo de infinidad de cámaras. Mantener el tipo es lo que toca, pero no siempre es posible y hay que comprender que detrás de cada una de ellas hay una persona real.
Desde la reina Isabel II o Máxima de Holanda, dos inigualables símbolos de fortaleza, hasta las royals más jóvenes como Kate Middleton o Meghan Markle, todas han sucumbido a las emociones en algún momento y, cómo no, los objetivos han estado ahí para captarlo. Una realidad que, lejos de suponer un problema, las convierte en mujeres reales y mucho más cercanas.
Tanto de emoción como de tristeza o alegría, reinas, princesas y otras royals han pasado por momentos más emotivos o complicados. Nos encanta verlas siempre felices, pero estas imágenes son más que conmovedoras, y invitan a reflexionar sobre la idea que tenemos de ellas.