El príncipe Harry (38 años) aparecía de nuevo a través de una retransmisión online junto al autor Gabor Maté, en este encuentro ambos charlaron acerca de la pérdida y la sanación personal. Una entrevista que ha dejado grandes titulares del hijo menor de Carlos III (74 años), que no ha dudado en atacar de nuevo a la Familia Windsor aunque ha querido obviar hablar de su hermano, el príncipe Guillermo (40 años).
La conversación entre el duque de Sussex y el autor, Maté, salpica de nuevo a la Casa Real británica y no deja en muy buena posición a Carlos III. El príncipe Harry afirma que sus traumas vienen asociados a haber vivido en su infancia en un "hogar destrozado".
Algunos momentos de la edad más temprana del menor de Lady Di fueron "increíblemente dolorosos" para él y siempre se ha sentido diferente con respecto a los otros miembros de su familia, además asegura que le faltó atención, cuando era pequeño. "He sentido a lo largo de mi vida, a lo largo de mis años de juventud, que siempre fui un poco diferente al resto de mi familia. Me sentía extraño y sé que mi madre sintió lo mismo, así que tiene sentido para mí".
El príncipe Harry sigue sincerándose sobre sus vivencias en la infancia y en juventud
Para el duque de Sussex, la publicación de Spare ha supuesto un gran alivio y afirma que es un "gran peso" que se ha quitado de encima. A pesar de contar aspectos de su vida que no lo dejan en buen lugar, como el consumo de drogas o la guerra de Afganistán, el príncipe Harry asegura que se siente "increíblemente libre" después de haber contado sus vivencias porque así habrá otras personas que puedan identificarse con él.
Según el Harry asegura, él era carne de cañón para el ejército porque "reclutan a personas de hogares desestructurados", respecto a su opinión acerca del conflicto bélico afirma que tanto él como otros compañeros del ejército "Muchos de nosotros no necesariamente estábamos de acuerdo o en desacuerdo".
La etapa en la que coqueteó con las drogas fue una época oscura para el hermano del príncipe de Gales. "La cocaína no hizo nada por mí, era más una cosa social y me hacía sentir seguro e incluso diferente a cómo me sentía, lo cual fue un poco el punto. La marihuana es diferente, eso realmente me ayudó".
Tras la pérdida de su madre, el príncipe Harry, estuvo perdido y luchando contra el trauma que le supuso la ausencia de la princesa Diana, por eso, afirma que la tomaba la droga psicodélica ayahuasca para sobrellevar el dolor y que "desde los 12 años, aparte de estar en un estado shock, estaba luchando o huyendo".
Meghan Markle ha sido la salvación del príncipe Harry
La llegada de Meghan Markle supuso un antes y un después en la vida del duque de Sussex. "La gente ha dicho que mi esposa me salvó, estaba atrapado en este mundo y ella venía de un mundo diferente y me ayudó a salir de eso". Acusa a su familia de no dejarle el espacio suficiente para poder desarrollar su personalidad, tal y como es: "Las veces que me aventuré a ser yo mismo, ser mi verdadero yo auténtico, de una forma u otra, ya sea a través de los medios, la familia o lo que sea, fue como escuchar: no seas tú mismo, vuelve a lo que se espera que seas".
Su marcha a Estado Unidos con su mujer y su hijo, Archie, fue el paso necesario para poder cerrar el "ciclo del dolor" y así educar a sus hijos en un ambiente más sano e intentando no dejar en sus retoños "ningún trauma".
El príncipe Harry no quiso hablar sobre si irá o no a la coronación de su padre, el 6 de mayo, fecha que coincide con el cuarto cumpleaños de su hijo mayor. Habrá que seguir esperando a ver cuál es la decisión que toma el royal, tras la expulsión de la que era su residencia en Reino Unido, Frogmore Cottage. Carlos III quiere que esa finca pase a ser la vivienda de su hermano, el príncipe Andrés.